Elecciones en Galicia

Las 3 preocupaciones del PP: el impacto del giro con la amnistía, los sondeos internos y el voto juvenil

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El PP ve ahora “dificultades” para que se pruebe que Puigdemont cometió terrorismo

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Alfonso Rueda y Alberto Núñez Feijóo, en un mitin en Pontevedra.

Alfonso Rueda y Alberto Núñez Feijóo, en un mitin en Pontevedra. / BEATRIZ CISCAR - EUROPA PRESS

Pilar Santos

Pilar Santos

La maquinaria electoral del PP en Galicia es envidiada por todos los partidos. La formación liderada por Alberto Núñez Feijóo, que lleva gobernando ese feudo desde 2009, tiene representación en los 315 municipios de la comunidad, un músculo incomparable. Cuenta con alcaldes y concejales repartidos en todo el territorio que trabajan al unísono para que el actual presidente de la Xunta y candidato del PP, Alfonso Rueda, siga en su puesto y no haya terremoto en la sede nacional de Génova.

Rueda decidió en diciembre que adelantaría las elecciones a febrero porque sobre su mesa había sondeos internos que le daban 40-41 escaños: una mayoría absoluta aseguradísima, ya que el corte son los 38 diputados. Feijóo, la última vez que se presentó, en 2020, logró 42 parlamentarios. Desde diciembre, sin embargo, las previsiones han ido empeorando por momentos y los conservadores han empezado a sentir el miedo a no seguir gobernando en una de las comunidades más importantes para ellos, con el impacto que podría suponer para Feijóo que el PP perdiera la presidencia de la Xunta. Los conservadores llegan con nervios a la recta final y sus tres principales inquietudes son estas. 

Revelaciones arriesgadas

“Las campañas electorales son como andar por un terreno lleno de minas”, le gusta decir a un veterano fontanero del PP madrileño. El asunto es que una de esas minas la han enterrado los propios populares, la han pisado y les ha causado heridas de consideración: todo ocurrió el fin de semana pasado, cuando fuentes de la dirección de la formación admitieron a 16 periodistas que Feijóo encargó un análisis jurídico sobre la amnistía, se abriría a dar un indulto “con condiciones” a Carles Puigdemont y considera que no será posible demostrar que el ‘expresident’ cometió un delito de terrorismo. 

Dejando el margen las consecuencias a la argumentación global del PP contra la amnistía todos estos meses, en la dirección nacional del PP y también en la autonómica consideran que el impacto de estas revelaciones será limitada en el electorado, aunque admiten que ha sido un error "garrafal” que ha dado margen a Vox, al que Feijóo tenía totalmente opacado en las elecciones hasta ahora, y también a Democracia Ourensana (DO), una formación populista desconocida hasta ahora para la mayoría de los españoles y que el domingo por la noche puede resultar trascendental si obtiene algún escaño.

Mayoría ajustada y la necesidad de Democracia Ourensana

El miércoles saltó la alerta en algunos despachos. Aunque por ley está prohibido que los medios de comunicación publiquen sondeos la última semana de campaña, no es ilegal realizarlos. Los partidos políticos se los encargan a sus empresas de encuestas, para poder seguir midiendo la temperatura a su electorado durante los últimos días. En los dos últimos ‘trackings’ que la dirección del PP ha recibido, según fuentes conocedoras de los documentos, Rueda corre peligro de no obtener por sí solo la mayoría absoluta, ya que se queda rozando los 38 escaños. Eso, sin tener en cuenta, el margen de error de todos los sondeos. 

Las encuestas del PP otorgan un diputado a Democracia Ourensana, de manera que Gonzalo Pérez Jácome, líder de esa formación populista y alcalde de la ciudad, podría ser determinante para que Rueda mantuviera la Xunta y esta no cambiara de acaba en manos de una mayoría de izquierdas y una presidencia del BNG. Ambas formaciones ya han hecho acuerdos en el pasado reciente: tras las elecciones de mayo se repartieron la alcaldía, para DO, y la Diputación, para el PP. El resto del arco parlamentario se lo repartirían el BNG (24-25) y el PSOE (12). Sumar y Podemos, que concurren por separado, se quedarían a 0, igual que Vox.

Mensajes para frenar al BNG

Aunque el caladero tradicional del PP de Galicia ha sido el mundo rural y de más edad, en estas elecciones y tras analizar los datos de las anteriores, en 2020, Rueda salió desde el primer momento a captar el voto joven y más centrado. El primer acto de su campaña electoral fue una reunión con un grupo de universitarios, la semana pasada apareció en una clínica veterinaria para ofrecer vacunas y microchips gratis a las mascotas y este miércoles abrió el sistema público de salud a las mujeres que quieran congelar sus óvulos. “Tenemos ahí un problema grave y ya lo vimos al analizar el triunfo de Feijóo en 2020. Arrasamos en los mayores de 65 años, pero pinchamos entre los jóvenes de 25 a 34 años, que son los que apuestan por el BNG [Ana Pontón]”, explica un vicesecretario del PP. 

La desesperación por esa fuga de votos explicaría la estrategia de los populares de meter en la misma ecuación a Pontón y la banda terrorista ETA, desaparecida hace más de una década. El PP lanzó un vídeo esta semana en la que señala los vínculos del BNG con EH Bildu. Ambas formaciones se presentaron juntas en las elecciones europeas de 2019 bajo el nombre Ahora Repúblicas, una marca que lideró Oriol Junqueras (ERC). 

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