La Sociedad Internacional de Bioética vuelve a la normalidad. Ayer finalmente se reunió el patronato de la entidad, que debe ser convocado por la alcaldesa en calidad de presidenta del patronato, aunque finalmente quien acudió a la reunión fue la concejala de Hacienda, Ana Braña.

En todo caso, el encuentro sirvió para desbloquear una situación enquistada desde hace tiempo, con la aprobación de las cuentas de la Sociedad de los años 2013 a 2015. De esta manera se da cumplimiento a los requerimientos del Protectorado de Fundaciones y de la Sindicatura de Cuentas del Principado, a los que ahora se enviará la información que solicitaron en su día en este sentido.

Marcelo Palacios, presidente de la SIBI, quiso dejar claro además que la entidad nunca solicitó 10.000 euros para la celebración del Congreso Mundial de Bioética, que se celebrará del 17 al 19 de este mes, sino que lo que reclamaba la Sociedad era poder gestionar directamente la subvención que les da el Ayuntamiento a través de la convocatoria de ayudas para Cooperación Internacional para agilizar la tramitación.

Del mismo modo se dio luz verde a la tramitación de la patente internacional del nombre de la entidad y de su logotipo, así como a la ampliación del contrato de una trabajadora que actualmente desempeñaba su labor a media jornada, y a lo largo de este mes lo hará a jornada completa para organizar el Congreso Mundial de Bioética que se celebrará del 17 al 19 de este mes.