Hace tiempo que vive en Madrid donde Que Li tiene su trabajo como miembro de la Guardia Civil -el primer agente de este cuerpo de origen chino- pero Gijón sigue en su corazón. A la ciudad llegó con once años y se fue como universitario de la Facultad de Comercio y Turismo camino de la academia del Ejército del Aire.

Li sigue añorando Gijón donde "me preparé para la vida y forjé mi carácter", dice en unas declaaciones exclusivas a LA NUEVA ESPAÑA. Y a la ciudad vuelve con sus hijos y su mujer para poder ver a su madre, comer una fabada y tomar un culín de verdad en una sidrería.