Un motorista de 24 años resultó ayer herido leve tras chocar contra un turismo en el tramo final de la calle Marqués de San Esteban y frente a la parada de autobús que hace esquina con la playa de Poniente. El joven, según los testigos, trató de esquivar dos coches sin darse cuenta de que uno de ellos estaba estacionado en doble fila, por lo que acabó colisionando contra su luna trasera. Su motocicleta quedó destrozada y a su alrededor se agolparon decenas de vecinos curiosos. Pese a lo impresionante del impacto, todo apunta a que el motorista no ha resultado herido de gravedad.

Según José Antonio Valencia, uno de los testigos, la colisión se produjo a las 19.40 horas. El joven fue uno de los que deambulaba por la calle antes de que se produjese el accidente y fue uno de los primeros en llamar a Emergencias. "El chico iba a bastante velocidad y por cómo hizo los giros parecía que estaba intentando esquivar a dos coches. Creo que no se dio cuenta de que uno de ellos, contra el que chocó, estaba estacionado. Se vio encajonado entre el coche que pasaba de largo y el que estaba parado y se dio de bruces, por detrás", resumió.

El herido de 24 años, que responde a las iniciales J. G. A., fue rápidamente atendido por varios de los viandantes. "Del susto intentó acercarse a la acera y le dijimos que no se moviese", explicaron algunos de ellos. El accidentado circulaba en una Sym Maxsym que quedó prácticamente destrozada, al igual que la luna trasera del Toyota gris contra el que se golpeó. De hecho, los agentes de la Policía Local que se desplazaron al lugar tuvieron que cortar la calle y llamar a un equipo de Emulsa para retirar todos los trozos de cristal y vertidos de aceite que se desparramaron por la vía. Fue atendido por una ambulancia de soporte básico y. pese al revuelo, su pronóstico es leve, aunque sí presentó diversas contusiones a su ingreso en el hospital.