Un hombre afronta una pena de un año de prisión acusado de enfrentarse a los agentes que acudieron a su casa en Nochevieja para medir el nivel de ruido. El encausado se encaró con ellos y llegó a agredir a uno, por lo que, de salir condenado, también tendrá que indemnizar al damnificado. La vista oral se celebrará esta mañana en el Juzgado de lo Penal número 1 de Gijón.

El Ministerio Fiscal sostiene, como hace constar en su relato, que sobre las 05.20 horas del día 1 de enero de 2020, dos policías locales acudieron a una vivienda en la calle Genaro Suárez Prendes, en Gijón, para realizar una medición de niveles sonoros. Como la medición fue positiva, se dispusieron a notificar la correspondiente denuncia a la titular del domicilio. En ese momento, el acusado, que se encontraba en la casa, se acercó a ellos y les increpó con expresiones como “gilipollas” e “hijos de puta”, recriminándoles por hacer su trabajo en Nochevieja. No contento con ello, cogió por la solapa de la cazadora a uno de los agentes y le empujó contra la pared, haciendo que se golpeara en la cabeza y en la espalda. También lo agredió con el codo en la cara.

Finalmente, pudo ser reducido entre los dos policías, pese a la violenta resistencia que opuso, que incluso provocó que los dos municipales cayeran al suelo. El policía sufrió contusiones en la cara y en la mano izquierda, de las que tardó en curar hasta 12 días.

Por todo ello, la Fiscalía solicita que se condene al acusado a 1 año de prisión y una multa de tres meses de multa con una cuota diaria de diez euros. Además, en concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Fiscal solicita que el acusado indemnice al policía local lesionado con 480 euros y al Hospital de Begoña, donde fue atendido, con el importe de los gastos de asistencia médica, más los intereses legales correspondientes.