Juegos y luces por el fin de fiestas en Vega

Los vecinos despiden su homenaje a San Bartolomé contentos por el volumen de asistentes: "No había ni dónde sentarse"

Por arriba, la celebración de la misa, ayer, en las fiestas de Vega y vecinos durante la sesión vermú en la carpa de la fiesta.

Por arriba, la celebración de la misa, ayer, en las fiestas de Vega y vecinos durante la sesión vermú en la carpa de la fiesta. / Ana Sánchez

Ana Sánchez

El tiempo acompañó ayer en Vega con un caluroso día de verano en la última jornada de actividades festivas, que pusieron el broche final a un fin de semana de celebración en honor a San Bartolomé. Y entre gaitas y tambores, una fiesta de la espuma y la última gran verbena, las inmediaciones de la iglesia de Vega se volvieron a llenar un día más para despedir los festejos, en una edición en la que, reconocen desde la comisión de festejos, "se ha dado todo" para reactivar a la parroquia tras la pandemia.

Juegos y luces por el fin de fiestas en Vega

Juegos y luces por el fin de fiestas en Vega / Ana Sánchez

El día empezó con la misa solemne. "Esta es una fiesta en honor del Señor", afirmó el párroco José Manuel Alonso. "Es algo típico y una celebración muy alegre que forma parte del último día de fiestas", reconocieron los feligreses. Las gaitas y los tambores amenizaron la jornada de la mano de la pareja formada por los gaiteros Xurde López y David Fernández. De hecho, fue así, al ritmo del himno "Asturias Patria Querida", como se dio inicio al acto religioso.

"La pandemia ha influido mucho. La gente tenía muchas ganas de salir, estos días no había ni donde sentarse", afirmó José Avelino Canellada, un residente del barrio que ayer hacía cola a las puertas de la iglesia. Y es que, aunque los vecinos de Vega han tenido que esperar dos años para poder volver a celebrar las fiestas, aseguran haberlo hecho en un ambiente "abarrotado de gente".

A la misa le siguió una sesión de vermú acompañada de la actuación de Ceferino Otero, que arrancó la jornada con "Gijón del alma", lo que animó a acercarse a muchos vecinos. "El ambiente que hubo estos días me ha gustado, porque ha sido familiar, hubo un público más adulto que bailaba y cantaba, pero también hubo mucha juventud", aseguró Rosa Martínez, otra vecina del barrio.

Desde la comisión de fiestas también saldan un balance positivo tras haberse logrado el que era su objetivo este año: "Centrarse en el público más infantil". Así, en la tarde de ayer destacó la actuación del "Payaso Tato" y una fiesta de la espuma, donde decenas de niños aprovecharon el caluroso día para refrescarse. Después, se hizo entrega del bollu a los socios y se celebró la última gran verbena, amenizada por "Grupo Da Silva" y el DJ Dani Vieites, que precedieron a un luminoso cierre de fiestas con bengalas y fuegos artificiales.