Marcelo Palacios deja el liderazgo de la SIBI tras 25 años en manos de la pediatra Isolina Riaño

"Es la persona adecuada", sostiene el fundador de la entidad sobre su sucesora | La médico promete "seguir el diálogo con la ciudadanía"

Marcelo Palacios, junto a su sucesora, Isolina Riaño, durante el acto de celebración con motivo del 25.º aniversario de la SIBI, ayer, en el Ayuntamiento. | Ángel González

Marcelo Palacios, junto a su sucesora, Isolina Riaño, durante el acto de celebración con motivo del 25.º aniversario de la SIBI, ayer, en el Ayuntamiento. | Ángel González / G. Cuesta

G. Cuesta

Momento histórico para la Sociedad Internacional de Bioética (SIBI) coincidiendo con su 25.º aniversario. La entidad afronta el primer relevo de su historia en la presidencia. El médico asturiano Marcelo Palacios, su fundador en 1996 y desde entonces máximo responsable, anunció ayer que cede el testigo a la pediatra del HUCA Isolina Riaño, cuya trayectoria está vinculada a proyectos sanitarios de cooperación en torno al tercer mundo. "Ceso voluntariamente, el tiempo pasa y las canas lo reflejan. Han sido 25 años de una aventura maravillosa", reconoció durante el acto conmemorativo por el cuarto de siglo, celebrado ayer en el Ayuntamiento de Gijón.

Será un cambio de ciclo paulatino que no tendrá un efecto inmediato. El nombramiento de la doctora Riaño se hará efectivo en junio, momento en el que ejercerá en solitario como presidenta del Comité Científico de la SIBI. Hasta entonces, Palacios le acompañará durante unos meses para "acompañarla en su rodaje y ayudarla en lo que pueda", según especificó ayer. Una vez materializado el cambio en la dirección, el médico asturiano ocupará la presidencia de honor. "No se van a librar fácilmente de mí. Aquí estaré, a veces para incordiar y otras para ayudar", bromeó.

Palacios agradeció a las instituciones y entidades su apoyo a lo largo de este cuarto de siglo antes de centrarse en la figura de su sucesora, quien también está presente en los comités de Cooperación y de Bioética de la Asociación Española de Pediatría. "Trabaja con la SIBI desde su fundación, en silencio y realizando tareas fundamentales en muchos aspectos, sobre todo aquellos de carácter social en determinados países desfavorecidos", elogió el aún presidente. Riaño ha trabajado en numerosas actividades de cooperación para Medicus Mundi y Arco Iris, Educación para el Desarrollo, de la que es vicepresidente y con la que ha realizado estancias en Malawi, Bolivia y Nicaragua para poner en marcha diversos proyectos. Palacios destacó que prepara a mujeres embarazadas en lugares "donde no hay ni comadronas". "Todo el Comité está de acuerdo en que es la persona adecuada. Estoy seguro de que darás a la SIBI unos rumbos mucho mejores de los que he podido darle yo, porque son otros tiempos. Eres una pediatra eminente", zanjó.

Esa dirección parece que será en base a línea de trabajo continuista. "Marcelo ha hecho posible un diálogo bioético con la ciudadanía en un mundo muy complejo. Esperamos seguir por ese camino", respondió Riaño tras recibir un caluroso aplauso de los asistentes al acto. La pediatra reconoció que "es un honor" tomar el testigo del fundador de esta sociedad centrada en promover, apoyar, extender y consolidar el conocimiento de la Bioética. Un paso que Palacios dio en 1996 cuando finalizó su etapa como político tanto en el Consejo de Europa como en el Congreso de los Diputados, en el que obtuvo escaño como diputado al formar parte de la candidatura del PSOE. Previamente, fue vicealcalde de Gijón entre 1979 y 1983, además de diputado regional en 1982.

Precisamente, el Ayuntamiento de Gijón fue ayer el escenario donde se hizo pública su decisión. Al acto con motivo del 25.º aniversario de la SIBI también acudió la alcaldesa Ana González: "Esta sociedad ha sido el foro y faro para abordar debates necesarios en Gijón. Ha promovido la toma de conciencia a todas las escalas de aspectos que afectan a nuestras vidas, como pudimos comprobar durante la pandemia. Es una construcción de puentes entre la ciudadanía y la comunidad científica desde el rigor científico. Y todo gracias a la figura de Marcelo Palacios".

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