La declaración institucional de Gijón sobre el fiasco del vial de Jove: "Hubo intereses políticos, no técnicos"

El gobierno local de Gijón ha elaborado una declaración institucional que llevará a la sesión plenaria de este mes para lograr el apoyo del resto de la Corporación. El escrito se cierra con dos conclusiones. La primera, señalar que el Ayuntamiento declara "su firme compromiso con las históricas necesidades de las vecinas y los vecinos de la zona Oeste de Gijón", así como "su apoyo sin ambages a las legítimas reivindicaciones que llevan años protagonizando para solucionar el problema del tráfico pesado con origen o destino en el Puerto de El Musel". La segunda se concreta en una solicitud al Ministerio de Transportes para que, "en el menor tiempo posible", se blinde "una solución definitiva para que el tráfico pesado deje de circular en superficie por los barrios de la zona oeste y el compromiso, por escrito, respecto a los plazos y la inversión del nuevo proyecto".

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En esta declaración señala el gobierno local que "uno de los grandes problemas sin resolver en el Principado de Asturias es, sin ninguna duda, el elevado nivel de contaminación de la zona oeste de Gijón". Y afirma, por tanto, que "una de las medidas más urgentes para afrontar esta grave circunstancia es la construcción de una infraestructura que permita sacar de la avenida Príncipe de Asturias los camiones de mercancías que se dirigen al puerto de El Musel". Cuantifica una cifra ya conocida: cada día, circulan por la avenida Príncipe de Asturias una media de 1.500 camiones.

El texto aclara que la ciudad "lleva demandando desde hace décadas" una obra que solucione los accesos a El Musel y que el proyecto hasta ahora aprobado, el vial de Jove, "iba a permitir reducir el volumen de tráfico y los elevados índices de contaminación, al sacar el tráfico de la Avenida Príncipe de Asturias (N-641) y de los barrios de La Calzada y El Natahoyo". Aclara la declaración, también, que el PGO de 1986 planteó una autovía en superficie por este tramo, una idea aprobada por el Ministerio de Obras Públicas en 1996 y que se descartó por "el rechazo vecinal". Añade que en 2005 se retomó el proyecto con el diseño que se había planteado hasta ahora pero que, "pese a estar el proyecto aprobado por el Director General de Carreteras desde el 19 de julio de 2021, no es hasta el 9 de mayo de 2023 cuando el Gobierno de España aprueba sacar a licitación la construcción de esta infraestructura, incluyendo el proyecto la construcción de un túnel de alrededor de 2 kilómetros".

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Y añade: "A partir de esa fecha, del 9 de mayo de 2023, y ante la proximidad de unas elecciones municipales y autonómicas, comienzan a desarrollarse una serie de circunstancias en relación con esta obra que, en la actualidad y con la información ahora disponible, resultan verdaderamente difíciles de entender y que, a todas luces, respondieron a intereses políticos y no técnicos". La declaración aporta fechas también ya conocidas, como que el 29 de agosto de 2023, "aludiendo a complejidades técnicas, y a petición de las empresas interesadas, se decide ampliar cuatro meses más el plazo para la presentación de ofertas, quedando así establecido para el 22 de enero de 2024". También que el pasado 27 de febrero, "y a pesar del compromiso del Ministerio de Transportes y del propio gobierno del Principado de Asturias de que la ampliación de cuatro meses para la presentación de ofertas no iba a repercutir en los plazos de inicio de las obras", surge un nuevo retraso al concederse un mes más de plazo para el estudio por parte de los departamentos técnicos de las ofertas presentadas.

"A los retrasos en la licitación de esta obra", recoge la declaración, "se unió además la opacidad del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y la escasa información facilitada por el Principado, puesto que a diferencia de lo que ocurre con la inmensa mayoría de las licitaciones que se realizan por parte la administración pública, en el caso del vial de Jove no se han publicitado ni el número de ofertantes (se estiman en una docena) ni tampoco sus nombres". La cronología elaborada por el gobierno llega hasta el presente, cuando el pasado 20 de marzo el Ministerio anuncia que el vial no se soterrará y "retomando, con leves actualizaciones, una propuesta que ya fue rechazada en los años 90 por la Comisión Europea, tras denunciar los vecinos que un vial en superficie lo único que logra es trasladar el grave problema existente a otro lugar, dividiendo el barrio en dos partes y ocasionando graves problemas medioambientales".