Lucus Asturum tendrá más campañas arqueológicas y Llanera mantiene el plan de que pueda visitarse

Durante los meses de julio y agosto del pasado año el equipo del yacimiento de Lucus Asturum, formado por 25 personas, trabajó en una parte de la vivienda descubierta en la finca de La Castañera (Lugo) y en el pozo del asentamiento. En esta última campaña hubo resultados muy positivos y algunos hallazgos, como el de una suela de zapato romano decorada, que se publicaron en revistas especializadas internacionales por su relevancia. La repercusión de lo que ha ido apareciendo en la zona ha hecho que crezca el interés público por el lugar y, por tanto, las visitas guiadas que se ofrecen.

"En esta última campaña hemos tenido que aumentar las visitas e incluso las charlas que damos a lo largo del año", explicó Esperanza Martín, arqueóloga responsable de la excavación, durante el transcurso de una de esas conferencias, que tuvo lugar ayer, en la Casa de Cultura de Lugo. Martín informó sobre los avances del yacimiento, así como sus proyectos de futuro. Una novedad ha sido el descubrimiento de "un asentamiento de la época post visigoda en la zona, ya datada con cronologías calibradas por carbono 14", detalló la arqueóloga.

Durante el acto, al que acudieron más de medio centenar de personas, Juan Manuel Rodríguez, propietario de la finca donde se sitúa el yacimiento y presente en la charla, recibió de manos del concejal de Cultura, Iván Pérez, un detalle como muestra de agradecimiento por facilitar las cosas al equipo que trabaja en la zona. Tanto es así que "siempre nos ha permitido hacer todas las intervenciones que han sido necesarias, y el hecho de contar con su apoyo hace que esa futura musealización que queremos alcanzar sea aún más factible", señaló Esperanza Martín.

Actualmente, gracias al apoyo del Ayuntamiento de Llanera, desde la Consejería de Cultura del Principado se está tramitando el proyecto para declarar como Bien de Interés Cultural (BIC) el yacimiento de Lucus Asturum.

Martín asegura que "en breve estará protegido por ley y el Consistorio apuesta por seguir investigando, por lo que, en un futuro esperemos que no muy lejano, se podrá musealizar y cualquier vecino podrá acceder de manera libre a los restos arqueológicos".

La consideración como Bien de Interés Cultural de un yacimiento lleva consigo muchas implicaciones. "Una de ellas es la protección intrínseca del espacio, otra el acceso a subvenciones y por último, la posibilidad recurrente, incluso, de generar puestos de empleo", dijo Martín.

De esta manera, "su musealización y puesta en valor es más fácil y más rápida porque los permisos se valoran de otra manera", concluyó la arqueóloga responsable de la excavación.