Con esa contundente frase mi querida madre me dejaba claro que los limpiacristales, bayetas de microfibra y demás productos de limpieza iban a pasar a mejor vida en cuanto yo pase por caja. Y es que esto que se ve arriba es el Kobold VG100 -250 euros-, un dispositivo capaz de limpiar de forma rápida, automática y sobre todo eficaz los cristales de toda la casa. Con sólo pulsar un botón el Kobold se pone en marcha y el resto es fácil de adivinar.