Los veigueños despedirán esta tarde a Antonio Prieto, ganadero jubilado y vecino de la localidad de Porzún, que desapareció de su casa el jueves por la tarde y fue hallado muerto en las inmediaciones de la vivienda familiar poco después de las nueve de la noche. La localización del cadáver fue un mazazo para su familia y el medio centenar de personas que se volcó en el operativo de búsqueda.
El funeral por Prieto, conocido como Antonio de Loutón por el mote de la casa familiar, será hoy a las cinco de la tarde en la iglesia de San Esteban de Piantón. El fallecido deja mujer y cuatro hijos, entre ellos los populares Marco Antonio y Bruno Prieto, que el pasado agosto recibieron el premio "Vegadense del año" por sus méritos deportivos (compiten en BTT) y empresariales (ambos tienen dos exitosas carreras ligadas a la comunicación y al ciclismo).
La mujer de Prieto fue la encargada de dar la voz de alarma al ver que anochecía y el hombre, de 77 años y "algo delicado de salud", no regresaba de su paseo habitual por Porzún. Participaron en el operativo un buen número de vecinos, junto a efectivos de la Guardia Civil, Protección Civil de Vegadeo y Castropol y un equipo de tres bomberos con base en el parque de Barres. Precisamente fue un bombero el que localizó el cuerpo del hombre junto a un talud de la carretera de Porzún y a unos 150 metros de la casa familiar. "Se cree que le pudo dar algo antes y por eso cayó por un pequeño desnivel cerca de casa", comentaba ayer un conocido de la familia, que lamentó que la búsqueda tuviera un fatal desenlace.
El Ayuntamiento de Vegadeo, que movilizó a los vecinos a través de las redes sociales, anunció por la misma vía la suspensión del operativo de búsqueda. De hecho, al hallarse el cuerpo se anuló la intervención de la Unidad canina de rescate del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), que estaba preparada para salir.
