Una librería de Cangas del Narcea invita a leer en grupo: "Motiva, marca metas para cada semana y permite socializar"

El negocio familiar "Treito" lleva dos décadas años promoviendo actividades culturales, entre ellas numerosas presentaciones literarias

Por la izquierda,Toño Fernández, Inma Fernández y Ángeles Menéndez en el Espacio Cultural La Treito.

Por la izquierda,Toño Fernández, Inma Fernández y Ángeles Menéndez en el Espacio Cultural La Treito. / D. Álvarez

D. Álvarez

La librería Treito de Cangas del Narcea hace tiempo que se convirtió en algo más que un comercio. La propuesta de actividades culturales abiertas de forma gratuita a todo el público ya es marca de la casa. Presentaciones de libros, encuentros con escritores, concursos literarios o charlas son algunas de las actividades que van organizando a lo largo del año y que en este mes de febrero ampliarán con la puesta en marcha del club de lectura “La Treito”.

El libro “Las herederas de la singer”, de Ana Lena Rivera, será el encargado de inaugurar el club, que ya cuenta con veinte personas inscritas de todas las edades. Los domingos es el día que se han marcado para comentar la lectura a través de un grupo de WhatsApp y a finales de mes, cuando prevén que finalizarán de leer la historia, se reunirán para analizarla en el Espacio Cultural La Treito, ubicado en un local que fue librería hasta hace unos años.

Inma Fernández, al frente del negocio familiar que inició en 1975 su madre, Ángeles Menéndez, y en el que también trabajó su padre, Toño Fernández, ambos jubilados actualmente, es la encargada de poner en marcha este nuevo proyecto. Se ve animada por dos vecinas amantes de los libros, María Riesco y la profesora del instituto cangués Leticia Pouso. “Fueron ellas las que me insistieron en hacer un club de lectura y, una vez pasadas las navidades, nos decidimos a crearlo”, explica Inma Fernández.

Inma Fernández, Ángeles Menéndez y Toño Fernández con el libro "Las herederas de la singer" en el Espacio Cultural La Treito

Inma Fernández, Ángeles Menéndez y Toño Fernández con el libro "Las herederas de la singer" en el Espacio Cultural La Treito / D. Álvarez

Una nueva iniciativa cultural de la librería que ya rondaba la cabeza de Ángeles Menéndez y Toño Fernández, “pero no había ni tiempo ni sitio para ponerla en marcha”. Lo que se solucionó con la llegada de la jubilación, que supuso el cierre de una de las dos tiendas que tienen en la capital canguesa y la oportunidad de dedicar el local en exclusiva a ser un espacio cultural. Además, ellos ya tienen ideas de futuro para enriquecer el club, como es organizar encuentros con los escritores de los libros leídos e, incluso, realizar intercambios con otros grupos de lectura del resto de España. Confían en la continuidad del club, ya que aseguran que los cangueses “son muy lectores” y califican de “impresionante” la cantidad de libros que llegan a vender. Aparte, Inma Fernández considera que formar parte de un grupo de lectura hace que “los integrantes estén motivados para leer, porque se marcan unas metas cada semana y ayuda a que no lo dejes, además de la relación que se establece”. En cuanto a lo que esta actividad puede aportar a la librería es más bien un valor intangible.

Esa máxima es la que les ha motivado durante casi dos décadas a promover actividades culturales. “Siempre tuvimos ganas de hacer cosas, porque nos gusta y estamos felices haciendo esto”, subraya la impulsora del negocio. Echando la vista atrás recuerda que la primera presentación literaria fue la del escritor con raíces canguesas Joaquín M. Barrero. Justo coincidió que él buscaba un sitio para presentar su libro y en la librería estaban pensando en reducir un espacio de exposición de muebles de oficina para poder dedicarlo a otras actividades como las presentaciones. A partir de ahí, son numerosos los escritores tanto cangueses como reconocidos a nivel nacional que han pasado por el local. Además, desde hace dos años, se organiza con la colaboración del Ayuntamiento cangués la Feria del Libro. Desde hace trece años, convocan un concurso de cuentos infantiles, además de promover encuentros de escritores locales, como el celebrado el pasado mes de noviembre.