Arriondas quedará protegida contra las crecidas de los tres ríos que confluyen en la localidad, Sella, Piloña y Chicu, en 2022, tras alcanzar ayer un acuerdo el Estado, el Gobierno del Principado y el Ayuntamiento de Parres para acometer un proyecto redactado hace ya tres años y que implicará una inversión de más de 16 millones de euros. El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán; el consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, y el alcalde de Parres, Emilio García Longo, sellaron un pacto para afrontar unidos las obras de defensa de Arriondas frente a las riadas.

El proyecto, pendiente de la tramitación ambiental, incluirá la construcción de muros y paseos, la sustitución de puentes y la ampliación de cauces, entre otras mejoras. Los trámites pendientes se completarán este año, lo que permitirá licitar la obra en diciembre o, a lo sumo, en enero de 2020. Dado que la ejecución del proyecto requerirá dos años de trabajo, las obras concluirán en 2022, según el calendario ofrecido por Morán.

El organismo local ha salido bien parado de la negociación de ayer: en un principio iba a aportar el 10 por ciento del gasto (más de 1,6 millones), pero ahora solo tendrá que conseguir los terrenos libres de cargas y asumir su mantenimiento futuro.

Tampoco le ha ido mal al Principado, que en principio iba a pagar el 30 por ciento de la obra (casi 5 millones), pero que solo abonará el 25 por ciento (unos 4 millones), y no tendrá que aportar dinero hasta 2020. La Confederación Hidrográfica del Cantábrico, que iba a pagar el 60 por ciento, asumirá finalmente el 75 por ciento del gasto (más de 12 millones).

El Alcalde destacó el de ayer fue "un día trascendental para el concejo". El Consejero admitió que la actuación, "compleja y cara", "ya no tiene marcha atrás", e ironizó con los 140 años que los técnicos estiman que la obra mantendrá a Arriondas protegida de las crecidas: "es un alivio también para nosotros, que hasta dentro de 140 años no volveremos a discutir de esto".

Morán, que resaltó la "urgencia" del proyecto, continuó la broma iniciada por Lastra, al poner en duda si podría volver a Arriondas dentro de 140 años. "Eres muy pesimista", comentó Lastra. "No, es que voy a tener problemas de agenda", replicó con gracia el secretario de Estado, acompañado en Arriondas por el presidente de la Confederación, Manuel Gutiérrez, y la delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa.

La FSA-PSOE, por su lado, se felicitó de que, "gracias al compromiso de los socialistas", se haya dado "prioridad a una actuación para atender las reclamaciones de la ciudadanía de Arriondas e impulsar un proyecto que el PP tenía guardado en un cajón desde 2015".

La secretaria de organización de la FSA, Gimena Llamedo, destacó que la presencia de Morán en Parres sirvió para que el convenio "se ponga en marcha en breve, para impulsarlo y ponerse ya a trabajar. Mientras otros prometen y no hacen nada, los socialistas lo demostramos con hechos", resaltó. "Tuvo que llegar un gobierno socialista para impulsar un proyecto que ya no tiene marcha atrás", concluyó.

Arriondas ha sufrido numerosas inundaciones, la más grave de los últimos años, en junio de 2010, cuando la localidad quedó anegada y se hizo necesario rescatar en lanchas a los pacientes del Hospital del Oriente. Durante el temporal de lluvias la última semana de enero el centro fue desalojado de nuevo por temor a que se desbordara el río Piloña. El proyecto para proteger Arriondas de las inundaciones había sido anunciado tras la riada de 2010. La promesa se repitió en 2015. El Hospital del Priente se construyó en suelos inundables que la Confederación había señalado en sus informes como "inundables".