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El jefe de la Policía de Parres se jubila tras 38 años de servicio

"Si de algo estoy orgulloso es del buen trato de los compañeros", señala José Ramón Fabián, que será relevado por Óscar Labra

José Manuel Pérez y José Ramón Fabián, que comenzaron a trabajar como auxiliares de la Policía Local de Parres en 1981 y se jubilaron este año. C. C.

El jefe de la Policía Local de Parres, José Ramón Fabián Junco (Prunales, 1957), deja el cargo al cabo de treinta y ocho años en el cuerpo, en el que entró en 1981 como auxiliar y fue haciendo méritos hasta llegar a subinspector. Fabián se acoge, con 61 años, a una jubilación temprana en la que espera dedicar más tiempo a sus tres grandes pasiones: el ciclismo, los paseos por la montaña y, sobre todo, a su primer nieto, Becker, que acaba de cumplir mes y medio. El parragués, que ya está siendo relevado en el mando por el vecino Óscar Labra Arobes, se marcha con la sensación del trabajo bien hecho.

Antes de poner el uniforme, animado por su padre, que fue quien le avisó de que salían dos plazas de auxiliar de policía en el concejo, Fabián fue empleado en una carpintería-tapicería y en el obrador de la confitería Calvo de Infiesto, entre otros oficios. Hasta llegó a vender libros a domicilio.

En las pruebas de selección a la Policía fueron él y José Manuel Pérez Somoano, que también se jubiló a comienzos de este año, los que mejor puntuación sacaron. Desde entonces, Fabián fue pionero en muchas cosas: resultó elegido como primer delegado sindical del personal de funcionarios locales en democracia y estrenó el primer coche (un Suzuki) que tuvo la Policía Local de Parres, entre otras cosas.

El parragués destaca la evolución en medios materiales para desarrollar su profesión: en los inicios no contaban ni con baño en su sede, que aún hoy se ubica en los bajos del Ayuntamiento.

"Tampoco las funciones eran las mismas; al principio, éramos casi como conserjes, nos ocupábamos de apagar luces y cerrar puertas en edificios públicos. Ahora tenemos accesos a los datos de la DGT, gestionamos expedientes de retiradas de vehículos y hacemos pruebas de alcohol", ejemplifica. "Además los nuevos agentes salen bien preparados de las academias", especifica.

Uno de los años más difíciles lo vivió en 2010, recién estrenado oficialmente en el cargo de inspector. En esa fecha coincidieron tragedias como el asesinato de un taxista en el concejo y la inundación del hospital de Arriondas, donde, además, estaba ingresado su padre. "Fueron momentos duros, tuvimos que salir en lancha", recuerda. Tampoco se olvida de cuando ETA amenazó con poner explosivos en el Descenso Internacional del Sella.

Pese a todo, el balance es positivo. "Hay anécdotas muy guapas, como a principios de los noventa, cuando todavía no estaba el hospital de Arriondas y atendimos a una mujer de Cabrales a punto de dar a luz. Le buscamos una pensión para que estuviera cómoda, pero antes de llegar dio a luz en el coche. No sé qué sería de aquel bebé, que hoy tendrá casi treinta años, pero me haría ilusión volver a verlo", asevera.

Fabián resalta el buen ambiente laboral. "Si de algo estoy orgulloso es de los compañeros: desde los más antiguos, como el fallecido Ramón Llamedo -El Roque-, hasta los últimos auxiliares que entraron, todos mantuvieron conmigo un trato cordial y de apoyo", asevera. Para despedirse de todos ellos prepara una cena en próximas fechas, en la que está previsto que participen policías recién jubilados de Cangas de Onís.

El hasta ahora jefe de la Policía Local de Parres confiesa que se va "con una espina clavada" y es la de ver que, tras años de peticiones, la calle Río Piloña de Arriondas sigue sin ser de doble sentido. "Dificulta mucho el tráfico cuando tenemos que cortar el tramo que va hasta el parque de La Llera para que se instalen atracciones. Se forman muchos tapones", justifica. Y saca pecho por la labor del cuerpo, que este año jubila a tres de sus seis efectivos: "Somos el servicio más cercano al ciudadano. Tratamos de ayudarlos en todo: desde acordonar una vivienda en llamas hasta rescatar un gato de un árbol", concluye.

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