Paella para 100 en Parres por San Antón

La comisión de festejos reunió a los vecinos de la localidad llanisca en torno a una comida popular y su tradicional concurso de postres

Valentín González y Yolanda Vázquez preparan una paella para cien personas en Parres de Llanes.

Valentín González y Yolanda Vázquez preparan una paella para cien personas en Parres de Llanes. / J. Quince

J.Quince

Antiguamente la fiesta de San Antonio Abad en Parres de Llanes reunía a cientos de personas en torno a una celebración tradicionalmente religiosa que contaba con la popular subasta de productos y bendición a los animales de la zona. Hoy en día, a pesar de que el paso del tiempo se ha llevado por delante muchas de las costumbres y citas festivas de la zona rural, en esta localidad llanisca continúan manteniendo su esencia. Es más, San Antón cuenta ahora con una mayor actividad gracias a una renovada comisión de festejos que se hace cargo de los mejores eventos del pueblo.

Tras la misa en honor a este Santo, patrono de los animales, que tuvo lugar el pasado miércoles 17 de enero, los vecinos volvieron a reunirse este domingo para una multitudinaria comida popular. Vermú al mediodía, paellada gratis para los asistentes, bingo, música, y el tradicional concurso de postres fueron las principales atracciones de esta jornada festiva.

“Normalmente tenemos la cita religiosa, pero este año decidimos hacer desde la comisión de festejos una fiesta en la que pudiéramos reunirnos la mayor parte de los vecinos del pueblo con paella y una tarde de juegos y bailes”, explicó Julia González, miembro de la asociación que organiza desde hace tres años las fiestas de Santa Marina de Parres de Llanes, que tiene lugar el 18 de julio.

Pero como aún quedan seis meses para esta gran fiesta, más de la mitad de los vecinos de la localidad no quisieron perder la oportunidad de disfrutar en comunidad de un soleado domingo de enero. En el recinto de la bolera de la escuela se instaló una pequeña barra de bar para servir el aperitivo y una carpa en la que se prepararía un delicioso manjar que llevaba ya días muy solicitado: “Lo anunciamos en redes sociales para que la gente se apuntara con previa reserva. Hubo mucha afluencia, tuvimos que cerrar el cupo en las cien personas”, señalan desde la comisión.

A las dos de la tarde el hambre empezaba a apretar, momento en el que se repartieron un centenar de raciones de paella elaborada por Valentín González y Yolanda Vázquez, de El Campu, especialistas en servir multitudinarias comandas desde hace tres años en el Occidente de Cantabria y el Oriente de Asturias: “Mi mujer y yo teníamos una churrería, pero a raíz de la pandemia nos pusimos a hacer paellas y parrilladas a domicilio. Trabajamos mucho y nos gusta participar en este tipo de eventos”, apuntó él. Más de once kilos de arroz, pollo, cabecero de lomo, calamares, langostinos y almejas fueron los ingredientes de esta gran paellada mixta que hizo las delicias de los vecinos llaniscos. 

La guinda al banquete lo pondría el tradicional concurso de postres en el que participaron una quincena de personas. Gran expectación en la presentación de las distintas propuestas con votación popular para finalizar con una cata de los dulces por parte de todos los presentes: tartas de chocolate, de queso, con frutas, bizcochos, hojaldres... Los postres mejor valorados del certamen contaron con tres premios de lujo para facilitar la continuación de increibles recetas, como una freidora de aire, una picadora o una máquina para hacer tortillas. 

La tarde continuaría con diversos juegos infantiles para los más pequeños, quienes también echaron una mano con un puesto de venta con merchandising del pueblo. También hubo espacio para bailes, bingo para los adultos y una rifa en la que se sortearon premios y una cesta repleta de productos alimenticios como embutidos, vinos, el tan valorado aceite de oliva, así como otros comestibles.

Los vecinos de Parres de Llanes, niños y mayores, se muestran agradecidos al tirón que están teniendo la sociedad de festejos y su implicación con la localidad: “Hace tiempo que se habían perdido nuestras costumbres y las fiestas, en general, ya no son lo que eran. Pero parece que poco a poco se están recuperando. La comisión tiene gente joven con ánimo de hacer cosas y eso viene muy bien para revitalizar el pueblo”, expresó Rubén González Díaz.