R. F.

La finca que alberga la Fábrica de Armas de la Vega tiene una superficie aproximada de unos 80.000 metros cuadrados de suelo calificado como industrial y en el que actualmente se construyen armas de alta precisión como componentes para misiles.

Los terrenos de la Vega, que en el siglo XIX pertenecían a las monjas benedictinas y que los perdieron con motivo de la desamortización de Madoz, han pasado de ser un lugar apartado en un extremo de la ciudad a integrarse de lleno en el corazón de la capital.

Junto a la autopista «Y», la Vega se encuentra a pocos minutos de la calle Uría a pie, y la zona, desde una vista cenital, muestra cómo los bloques de edificios rodean completamente los terrenos que ahora quiere abandonar Santa Bárbara.