Pablo GALLEGO

En teatros como el Campoamor no hay tiempo para el descanso. Apenas una semana después de cerrar la temporada de ópera, y tras el debut del Festival de danza, ha llegado el turno del teatro lírico español, la zarzuela. Un ciclo que, a partir del próximo 7 de marzo y con el patrocinio de LA NUEVA ESPAÑA, presentará en el coliseo ovetense «cuatro títulos de zarzuela grande», según los ha descrito el director musical Cristóbal Soler: «Luisa Fernanda», «La chulapona», «La del manojo de rosas» y «Los diamantes de la corona».

«Luisa Fernanda», un clásico de Moreno Torroba, levantará el telón del ciclo. Será la primera vez que el personal del Teatro de la Zarzuela de Madrid, responsable de la producción, estrene un montaje de este tipo fuera de su casa. Un reto al que, según la jefa del coliseo madrileño, Margarita Jiménez, se enfrentan tranquilos: «El coro, la orquesta y el equipo del teatro nos dan una gran seguridad, además del apoyo absoluto del Ayuntamiento».

Un año más, el encargado de mostrar ese «apoyo absoluto» del Consistorio ovetense a la zarzuela fue su alcalde, Gabino de Lorenzo. La presencia del regidor es habitual en el lanzamiento de cada temporada. Y ayer dio un paso más, al trasladar la presentación desde el salón de té del teatro -donde suelen celebrarse todas las ruedas de prensa- hasta el escenario del Campoamor.

Mientras sonaba el pasodoble «Hace tiempo que vengo al taller», de la zarzuela «La del manojo de rosas», -interpretado al piano por Julio César Picos Sol-, De Lorenzo y Teresina, la actriz de «Teatro Margen» Tere Quirós, llegan al bar El Parnasillo Madrileño, también del «Manojo». Para darle la réplica, el Alcalde ha contado este año con la ayuda del actor Luis Varela, amigo de De Lorenzo, en el papel del camarero Espasa.

Juntos interpretaron una escena en la que De Lorenzo, ovetense en la capital española, acude junto a su mujer a tomar un culín de sidra al bar en el que trabaja Varela, con la escenografía de «El manojo de rosas». Los desencuentros entre camarero y cliente terminaron con el Alcalde escanciando sidra sobre el escenario, para enseñarle a Varela cómo hacerlo. Mientras, la Capilla Polifónica «Ciudad de Oviedo» cantaba «Amigos, siempre amigos» de la zarzuela «Los gavilanes». El coro cantó también «Chalaneru», canción popular que De Lorenzo dedicó a Teresina, por ser ayer el día de San Valentín y el 68.º cumpleaños del Alcalde.

Tras la representación, la concejala del Cultura, Belén Fernández Acevedo, definió la temporada de zarzuela como una «apuesta cultural estratégica» del Ayuntamiento. Un ciclo pensado para «reforzar la proyección turística de Oviedo» y «dar fuerza al sector de la industria cultural, en el cual creemos». «La cultura es amplia y casi ninguna ciudad puede desarrollar todas sus facetas, pero los ovetenses respaldan con su asistencia esta programación», afirmó.

La temporada de zarzuela del Campoamor, en la que también colabora Cajastur, comenzará el 7 de marzo con «Luisa Fernanda». Durante cuatro funciones -también los días 9, 11 y 12 del mismo mes-, Cristóbal Soler y Luis Olmos dirigirán esta nueva producción. El título marca el debut en Oviedo de la soprano Cristina Gallardo-Domas, conocida en el circuito internacional de ópera por su interpretación de las heroínas de Puccini y que cantará zarzuela «por primera vez», dijo Soler. El director musical ha comenzado ya los ensayos con la orquesta «Oviedo Filarmonía», que se encargará de los cuatro títulos, al igual que la Polifónica.

Los días 10, 12, 14 y 16 de abril subirá al escenario «La chulapona», también de Moreno Torroba. El Campoamor presentará «una producción histórica del Teatro de la Zarzuela», protagonizada por Milagros Martín y dirigida por José Miguel Pérez-Sierra. Al mes siguiente y durante ocho funciones, la temporada recupera «El manojo de rosas», de Sorozábal, en la producción de Emilio Sagi repuesta en el verano de 2009. Al frente, las sopranos Sabina Puértolas y Maite Alberola y el barítono asturiano David Menéndez.

El Festival de Zarzuela se despedirá entre el 12 y el 18 de junio con «Los diamantes de la corona», de Barbieri. El Teatro de la Zarzuela recuperó este título la temporada pasada y el Campoamor toma ahora el testigo de esta obra, con una puesta en escena «clásica», de José Carlos Plaza y en la que «el protagonismo le corresponde al coro», afirmó Soler. El presidente de la Fundación musical Ciudad de Oviedo, Francisco González Álvarez-Buylla, responsable del coro y de la orquesta, contribuyó a la presentación con un llamamiento para que los asturianos «acudan al teatro».

Tanto el director de relaciones institucionales de Cajastur, César Menéndez Claverol, como Margarita Jiménez y Cristóbal Soler destacaron la importancia de la temporada ovetense, con cuatro títulos de «zarzuela grande». Un término que, como explicó el director musical, describe a aquellas obras «con una extensión operística de 3 actos». «Con ellos el Campoamor ayuda a defender el género lírico español por excelencia», apostilló Soler.