Más de un millar de personas se han manifestado hoy frente a la Delegación del Gobierno en Asturias, en Oviedo, parar exigir el mantenimiento de los puestos de trabajo de la fábrica de armas de Trubia y una mayor implicación del Ministerio de Defensa en la defensa del sector armamentístico español.

Bajo una intensa lluvia y fuertes rachas de viento que impidieron levantar muchas pancartas, los manifestantes han recorrido varias veces la plaza de España mientras una representación sindical se entrevistaba con el delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, y le hacía entrega de un manifiesto en defensa del empleo y de la fábrica de armas.

Los secretarios generales de la Federación de Industria de CCOO, Damián Manzano, y del Metal de UGT, Eduardo Donaire, han encabezado la representación sindical que durante más de media hora se ha entrevistado con De Lorenzo, que como alcalde que fue de Oviedo durante más de veinte años, conoce bien todo lo relacionado con las fábricas de armas.

Tras la reunión, ambos han incidido en la necesidad de que el Ministerio de Defensa asuma un papel activo para impedir los planes de General Dynamics y el desmantelamiento paulatino del sector armamentístico español.

Donaire ha incidido en que no se puede aceptar que se acabe con todo un sector por un momento coyuntural malo para que la multinacional se quede con el mercado español y venda aquí lo que fabrique fuera.

Manzano ha calificado también de éxito las movilizaciones que han llevado a cabo los trabajadores de la empresa y ha advertido de que éstas continuarán si no se busca una alternativa no traumática a este ajuste laboral y se abre una mesa de negociación.

La concentración de Oviedo ha coincidido con la que se ha celebrado hoy en Palencia, A Coruña, Granada, Sevilla y Madrid, ciudades que albergan instalaciones de la empresa de defensa Santa Bárbara Sistemas, perteneciente a la estadounidense General Dynamics.

La multinacional anunció el pasado mes la presentación de un ERE que afecta a 700 empleados de toda España y el cierre de la fábrica de armas de A Coruña.

En el caso de Trubia, el ajuste supondrá el despido de 289 empleados, prácticamente la mitad de la plantilla actual, después de que hace unos cuatro meses se integrasen en esa factoría los trabajadores de la fábrica de armas de La Vega, en Oviedo.

En una reunión celebrada ayer en Madrid para abordar los recortes de plantilla previstos por la multinacional, General Dynamics ofreció una posible disminución de los afectados por el ERE y mejorar las indemnizaciones para los trabajadores que acepten de manera voluntaria la baja, 25 días por año trabajado con un tope de 14 mensualidades.

También anunció que se primarán las prejubilaciones voluntarias para los trabajadores de entre 59 y 63 años.

Por su parte, los sindicatos reclaman que se paralice el periodo de consultas del ERE, y de momento han logrado que el plazo de negociaciones, que terminaba el 15 de marzo, se retrase hasta el 31 del mismo mes.

En 2012 General Dynamics registró unas pérdidas de 332 millones de dólares, frente a los beneficios de 2.526 millones de 2011 debido al menor gasto en el sector a nivel internacional.

Los sindicatos insisten en que esas pérdidas no son un argumento válido para justificar un "durísimo" plan de ajuste, ya que en los últimos diez años la empresa ha tenido beneficios.

La huelga en la multinacional ha continuado hoy con concentraciones frente a las delegaciones de Gobierno de las capitales afectadas. EFE