El colegio público de Colloto inaugurará este viernes los nuevos espacios de los que por fin disfruta ya la comunidad escolar, después de unas reclamadas obras de ampliación de los aularios y de la reforma de los espacios asignados al comedor escolar. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, el colegio se volverá a quedar pequeño el próximo curso, ante el aluvión de alumnos que recibe cada año de forma progresiva. Colloto duplicó su alumnado en la última década con el boom urbanístico, y necesitará aún más aulas para dar cabida al alumnado. Los datos de la evolución de la matrícula hablan por si solos. Según los datos facilitados por el colegio, en 2008 eran 140 los alumnos matriculados en este centro escolar, mientras que en la actualidad la cifra asciende a 280 niños, el doble.

Conocedores del problema, los técnicos de la Consejería de Educación del Principado han previsto ya una segunda ampliación, que está a la espera de una dotación económica para abordarla. Existe un proyecto redactado para asumir la segunda fase de las obras para dotar al centro de cuatro nuevos aularios para los alumnos de Primaria. Los planes de la administración del Principado son incluir esta obra en los presupuestos del próximo año, que aún están en el aire. En este compromiso confía la comunidad educativa del colegio de Colloto, muy contenta mientras tanto con el resultado de las últimas mejoras en el centro.

"El colegio no se reformaba desde los años ochenta, era una necesidad muy urgente", explica la directora del centro, Covadonga Álvarez Cofiño. "Pero la ampliación ya se nos queda corta para el curso que viene. El proyecto está redactado, con los cuatro nuevos aularios previstos, y esta ampliación ya se abordó pensando en la siguiente. Lo único que falta es que se incluya en los presupuestos, confiamos en que así sea", explicó a este periódico la responsable del centro.

Los nuevos aularios que este viernes inaugura el centro escolar de Colloto están conectados con la estructura original del colegio, y han supuesto una inversión de 420.000 euros. Los trabajos, con un plazo de ejecución de seis meses fueron entregados el pasado verano, de manera que los escolares pudieron estrenar las aulas con el inicio del curso, el pasado septiembre.

A pesar de la complejidad que supuso que los alumnos tuviesen que convivir con las obras el curso pasado, la experiencia resultó un éxito en Colloto. Al contrario de lo sucedido en otros colegios del municipio con obras pendientes, en Colloto no hubo controversias, polémicas, ni problemas con los trabajos. Tampoco supuso un problema que los alumnos de Primaria tuviesen que dar las clases en unos barracones prefabricados. Fue también durante el verano cuando se abordaron las obras de ampliación del comedor, cuya financiación corrió a cargo del Ayuntamiento de Oviedo. También era una obra muy demandada, puesto que los pequeños tenían que comer en varios turnos porque el espacio era muy reducido.