"La posición de Omán propicia la mezcla de aves de Europa, Asia y África, es un puente biológico entre dos continentes, en el que se han registrado más de 500 especies". Así lo dijo ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA Luis Mario Arce, ornitólogo y periodista de LA NUEVA ESPAÑA, durante la proyección y conferencia del ciclo de viajes ornitológicos de SEO/Bird Life Asturias, en la que dejó constancia del tremendo interés del Estado arábigo para los especialistas en ornitología.

Arce añadió que el país, ubicado en la península Arábiga, ofrece una avifauna de gran interés biogeográfico, "por la mezcla de especies de esas tres regiones zoogeográficas". La posición que propicia esa convergencia favorece también el paso de numerosas especies migratorias, entre las cuales destacan las concentraciones de aves rapaces, en particular águilas medianas y grandes, entre las que el especialista mencionó la imperial oriental, la esteparia y la moteada.

Ir a Omán a observar aves es una de las metas de cualquier ornitólogo viajado o leído. La razón la dio Arce en su exposición: "El país forma parte de un corredor migratorio que comunica entre sí Eurasia y África".

La diversidad de avifauna es equiparable a la de España, con la diferencia de la mezcla de orígenes, "que desemboca en una notable singularidad", aclaró Luis Mario Arce. Por otra parte, la variedad de hábitats, con 1.700 kilómetros de costa, grandes cordilleras que alcanzan los 3.000 metros de altitud, desiertos (principalmente pedregosos) y extensas tierras de cultivo, favorece la presencia abundante de aves. "Otra virtud de Omán es la facilidad que ofrece para moverse de forma independiente. No sólo es un país seguro, sino hospitalario", recalcó. "Es fácil encontrar alojamiento a precios muy razonables y se come muy bien por tres o cuatro euros", añadió.

Arce realizó su expedición entre finales de enero y principios de febrero, por la abundancia de especies invernantes, el buen nivel de agua en los humedales, que propicia la presencia de aves acuáticas, el inicio de la cría en las especies desérticas, y las agradables temperaturas de la estación, que superan los 30 grados por el día y no pasan de 15 por las noches. El recorrido le llevó a cruzar el territorio omaní de un extremo a otro. "Empezamos en Muscat y nos dirigimos al Norte, a la región costera de Al Batinah, hasta llegar a sólo dos kilómetros de la frontera con Emiratos Árabes. Luego nos movimos al Sur, casi hasta el límite con Yemen". Arce evitó pasar a Musandam, en el extremo norte, una zona enfrentada a Irán, al otro lado del Golfo de Omán. A la conferencia acudió la estudiante omaní de "Erasmus" Fatma Ali Al Hajri.