El edificio del antiguo Sanatorio Blanco, ubicado en la intersección de las calles Padre Vinjoy y Muñiz Toca, pasará a la historia a comienzos del próximo año. Al menos así lo aseguran fuentes de la constructora Los Álamos, compañía que adquirió el solar ,recalificado por el Ayuntamiento de Oviedo en 2010, para levantar un bloque de siete plantas y 28 viviendas que ya está tratando de colocar en el mercado.

La intención es que los trabajos para la demolición del edificio actual, construido en 1949 y que hasta hace escasos años acogió diferentes servicios sanitarios privados, se inicien dentro de los tres primeros meses del año. "Salvo que los trámites administrativos pertinentes se demoren los trabajos físicos comenzarán en el primer trimestre", declara Esteban Abarquero, jefe de la División Comercial que se encarga de la venta de las viviendas proyectadas.

Si bien no es la primera vez que se anuncia que el edificio será derruido en cuestión de meses, en ninguna ocasión hubo tantos indicios de que el anuncio no tiene marcha atrás. Prueba clara de ello es que el proyecto, diseñado por los arquitectos Joaquín García Menéndez y Pablo Gamonal Lombardero, se encuentra ya en fase de redacción y verá la luz próximamente.

Los promotores admiten que uno de los aspectos que les llevó a fijarse en los terrenos para el proyecto es su ubicación. "Existen pocos terrenos tan céntricos y con las principales vías de acceso a la ciudad tan próximos", declara el trabajador de la compañía que esta misma semana ya colocó carteles en las ventanas del viejo inmueble para anunciar el inicio de la promoción.

La situación actual del edificio, con más de 60 años de servicio, recomienda que la nueva obra se realice desde cero. "Está muy deteriorado por dentro y se decidió derribarlo todo y comenzar a construir en una parcela totalmente vacía", recuerda un Abarquero que reconoce haber quedado impresionado por la dimensión de lo que en su día también fue la clínica Fontán.

Respecto a las condiciones en las que se desarrollará la obra, la promotora asegura que "se mantendrán las condiciones del convenio firmado en su día entre la anterior propiedad y el Ayuntamiento". Un acuerdo que consistía en la recalificación de los terrenos a cambio de ciertas contraprestaciones para el Consistorio ovetense.

Dicho acuerdo dio pie en su día a diferentes proyectos del entonces equipo de gobierno del PP, pero la promotora de las viviendas descarta grandes cambios en el entorno de la parcela. "La construcción del edificio, los garajes y sus servicios ocupará casi toda la finca", señalan, al mismo tiempo que reconocen que las obras "permitirán ganar un poco de terreno para ampliar las zonas verdes".