El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, acusó esta mañana al Alcalde de Oviedo, el socialista Wenceslao López, y la vicealcaldesa de Somos, Ana Taboada, de tirar "una cortina de insultos" con la intención de "tratar de ocultar la incompetencia del tripartito" a la hora de promover el cambio de nombre de 21 calles en aplicación de la Ley de Memoria Histórica, tumbado por la justicia. Dicha acusación se produce en respuesta a las declaraciones del regidor y la edil en la que calificaban al PP de "fascista" y "cavernícola" y lo comparaban con la Alemania nazi por impulsar la denuncia que ha terminado con una sentencia que declara nulo el cambio del callejero.

El también exalcalde popular cree que el gobierno "intenta polarizar y dividir" a los ovetenses con el objetivo de obtener "un rédito electoral" y lamenta que el ejecutivo local rechazara su mano tendida para negociar con la oposición la modificación de las calles "de acuerdo a la ley" y logrando el consenso de todos los grupos.

A juicio de Caunedo, El Alcalde y sus socios "insultan" con sus palabras al PP y a "miles y miles de ovetenses" que respaldan la postura de los populares en este tema. Algo que a su juicio es reprochable especialmente a López por su condición. "No es el representante de un partido, sino de todos los ovetenses, pero busca tapar su incompetencia", señala.

El concejal popular sospecha de la existencia de reparos verbales de los funcionarios del Ayuntamiento a la medida municipal tumbada esta semana por los tribunales. "Es la primera vez que veo un expediente sin informes jurídicos y me lleva a pensar que hubiera oposición verbal de los trabajadores públicos", indicó Caunedo sobre lo que califica un cambio de calles "discrecional".

Del mismo modo, criticó lo que consideró "ataques a la independencia de la justicia" por parte del tripartito, a su entender "porque no corroboran ni satisfacen su gestión".