La víctima del atropello con fuga de Oviedo sigue muy grave en el HUCA

La Policía Local intensifica las investigaciones para tratar de identificar al presunto autor

Las manchas de sangre señaladas ayer sobre la calzada de la calle González Besada con pintura fluorescente.

Las manchas de sangre señaladas ayer sobre la calzada de la calle González Besada con pintura fluorescente. / LNE

Lucas Blanco / P. Á.

La mujer de 55 años hallada malherida sobre la calzada de la calle González Besada pasadas las seis de la madrugada del martes tras sufrir un supuesto atropello con fuga continúa ingresada en estado muy grave en la UCI del HUCA, según confirmaron a este diario fuentes cercanas al hospital. Mientras la víctima pelea por su vida, la Policía Local está intensificando las investigaciones para tratar de identificar al presunto autor, aunque de momento la falta de testigos visuales de lo ocurrido está complicando el avance de las pesquisas.

A priori no hay dudas de que se trató de un atropello con fuga. Las lesiones sufridas por B. P. A. son totalmente compatibles con un violento impacto recibido por parte de un vehículo que todo apunta a que desplazó el cuerpo de la atropellada unos cuantos metros hasta dejarla tumbada a la altura del número 31 de la calle, muy cerca del punto en el que se juntan esta vía y Muñoz Degraín.

La hoja de ruta parece clara. Además de la recolección de restos del coche realizada justo después del hallazgo del cuerpo, las pesquisas se están centrando en dos puntos fundamentales: la revisión de cámaras de vigilancia del tráfico más cercanas al punto del siniestro, y la búsqueda intensiva de personas que pudieran haber pasado bien a pie o bien en coche por el lugar del atropello.

A la espera de conocer los avances de los trabajos de la Policía Local, que cuenta con un equipo especializado de reconstrucción de accidentes, B. P. A. continúa luchando por mantenerse con vida y recuperarse de las graves lesiones sufridas tanto en la zona torácica como en otras partes del cuerpo. Las primeras observaciones de los sanitarios apuntaban a que la mujer había sufrido un traumatismo torácico de consideración, así como otras lesiones de menor calado en otras partes del cuerpo a causa de los golpes. No obstante, distintas fuentes consultadas por este periódico coincidieron en señalar que el estado de salud de la mujer se mantenía estable dentro de la gravedad.

El suceso desvelado por LA NUEVA ESPAÑA este martes ha generado gran inquietud entre los vecinos de la zona. "Es cierto que es una calle peligrosa porque es el inicio de la Ronda Sur y muchos conductores van demasiado rápido, pero lo que no es de recibo es que alguien te atropelle por accidente y se vaya dejándote malherida en el suelo", manifestó Remedios Alegre, vecina de la calle Muñoz Degraín tras cruzar por un paso a peatones situado a escasas decenas de metros del lugar donde todavía ayer podían verse las marcas de sangre de la herida rodeadas por pintura fluorescente.

Indignación

Además de preocupación, muchos muestran indignación. Los recientes casos del conductor kamikaze que causó un grave accidente en la "Y" y el del ladrón de coches que acabó con la vida del guardia civil Dámaso Guillén cuando este se interpuso en su camino para evitar el atropello de unos ciclistas juveniles que participaban en una prueba en Beifar (Pravia) llevan a los vecinos a hablar ya de un problema social. "No es normal que en tan poco tiempo haya tantos sucesos de este tipo. Nos debemos de estar volviendo locos", afirmó José Suárez, residente del barrio del Cristo y paseante habitual de la calle del atropello.

Ante estos sucesos, los vecinos coinciden en que, más que vigilancia, hace falta una mayor conciencia social de los conductores. "Por muy dura que sea la ley, si no hay respeto no hay nada que hacer", indica Suárez con tono de enfado.

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