Hallan ahorcado en su celda a Igor Postolache, el asesino de la niña Erika en Oviedo

Los funcionarios lo encontraron sin vida cuando iban a recogerlo para un traslado a Galicia

P. T. / O-R. M. S.

Igor Postolache, el asesino de la niña Erika en Oviedo, ha aparecido muerto en la mañana de este miércoles en la cárcel de Villahierro, en Mansilla de las Mulas (León), donde permanecía cumpliendo prisión tras el acuerdo alcanzado por el crimen ocurrido en el barrio de Vallobín.

Al parecer, según han confirmado fuentes oficiales, los funcionarios del centro penitenciario se disponían a recogerlo en su celda para proceder a un traslado a otro centro penitenciario en Galicia. Fue entonces cuando se percataron de que estaba sin vida.

Igor Postolache había salido ya del plan antisuicidios que se aplica en las cárceles y, según fuentes conocedoras de lo sucedido, no había indicios de que pudiese tener intenciones de quitarse la vida ni de que le afectase gravemente su traslado de prisión. La principal, y casi única, hipótesis que se maneja es la de suicidio, dado que el asesino de Erika apareció ahorcado en su celda.

Postolache, había aceptado los hechos, que le abocaban a una pena de prisión permanente revisable por el crimen de Erika Yunga, de 14 años, a la que atacó en el portal cuando llegó del colegio el pasado 5 de abril. El hombre moldavo, de 32 años, violó y asesinó a Erika, que era su vecina, el 5 de abril de 2022.

Asumió su culpabilidad mediante su escrito de defensa, enviado al juzgado de instrucción 2 de Oviedo, en el que reconoce como "ciertos los hechos relatados por la Fiscalía", sobre cómo planificó el ataque y luego agredió sexualmente y mató a la niña, que vivía en su mismo edificio y a la que había estado acechando.