La Corredoria convierte a la gimnasia rítmica en un deporte mayoritario: "Para empezar solo hace falta una camiseta y unos leggins"

El club del barrio cuenta con casi un centenar de deportistas de todas las edades y niveles: "Lo más importante es querer aprender y, sobre todo, divertirse"

Dice Olga López que para iniciarse en la gimnasia rítmica solo hacen falta "una camiseta y unos leggins" y que no se necesitan aptitudes especiales para poder disfrutar de un deporte que cada vez tiene más peso en el barrio más poblado de Oviedo a pesar de estar englobado en la lista de los minoritarios. La presidenta del Club Rítmica La Corredoria lo sabe de sobra porque así comenzaron las casi cien deportistas --la mayoría son niñas, aunque también hay varones-- que hoy en día forman parte de una entidad que sigue creciendo de forma exponencial tanto a nivel de inscripciones como en palmarés competitivo. "Este es el primer año que estamos en la Segunda División y todavía tenemos opciones de ascender a Primera. En dos semanas competimos en Logroño y si hacemos un buen papel se puede conseguir", explica López.

Competiciones aparte, la gimnasia rítmica se ha convertido en una seña de identidad en La Corredoria y en todo un reclamo para que los niños se acerquen al deporte. "En el barrio se practican todo tipo de disciplinas, pero no en todos los sitios hay oportunidad de hacer gimnasia rítmica. Es evidente que nos gusta ganar a nivel competitivo, pero ver que cada día hay más niñas y niños disfrutando de esto gracias al club es lo más satisfactorio", señala Olga López. No en vano, en el Corredoria Arena, el cuartel general del equipo, entrenan a diario deportistas de todas las edades. "Tenemos pequeñas gimnastas que empiezan con cinco años", afirma la presidenta. "Hay mucha gente del barrio, pero también vienen de otros sitios. Tenemos una niña de Teverga, por ejemplo", añade.

Las gimnastas comienzan a formarse en la sección "Escuela". Las deportistas de la escuela podrán pasar al nivel competición solo cuando las entrenadoras consideren que su nivel y potencial es el adecuado, y que las propias gimnastas, así como sus familias, acepten esa decisión. No existe otro criterio, ni por edad, ni por antigüedad en la actividad. "En la escuela se entrena dos días por semana y dos horas en cada sesión. Al pasar a competición, la frecuencia de entrenamientos aumenta, mínimo, a tres días a la semana, llegando a ser diaria para los niveles superiores (base y federado). Incluso, dependiendo de la época, puede haber entrenamientos sábados y domingos. Eso ya es otro nivel", explica Olga López.

A lo largo del curso, el club organiza varias exhibiciones y torneos en los que participan todas las gimnastas, de todos los niveles. Quienes ya están en los niveles superiores participan en dos tipos de competiciones: los torneos y los campeonatos. Los torneos son competiciones organizadas por cada club, que ofrecen participación a otras entidades. Estos no tienen ninguna trascendencia desde el punto de vista oficial, pero sus resultados son muy apreciados por todos los clubes. Normalmente se hacen en distintas localidades dentro de la provincia, en las sedes de cada club. "Ocasionalmente, también se va a torneos organizados en comunidades vecinas", dice López. Los campeonatos son competiciones organizadas de manera oficial por la Federación de Gimnasia del Principado de Asturias, la Federación Española de Gimnasia o por otras federaciones de otras comunidades.

El club se fundó en el año 2006 y a lo largo de todos estos años ha habido deportistas que han cosechado éxitos tanto a nivel individual como de club. Una de las más destacadas es Itziar Ordóñez, que es del barrio y lleva desde los cuatro años entrenando. El club cuenta además con uno de los únicos cuatro niños que hay federados en Asturias, Gabriel Vigil, que también es de La Corredoria. "Estamos orgullosos, pero insisto en que lo principal es que los niños quieran venir a aprender, a hacer deporte y, sobre todo, a disfrutar", subraya Olga López.