El juicio al padre de las gemelas de La Ería (Oviedo), por coacciones a su mujer tras la tragedia, se celebrará el 4 de abril

La falta de conformidad del acusado envía el caso a la vía penal mientras la madre sigue en Rusia con su otro hijo

Compañeras de las niñas fallecidas colocan velas en el portal de su casa de La Ería, el pasado mes de mayo.

Compañeras de las niñas fallecidas colocan velas en el portal de su casa de La Ería, el pasado mes de mayo. / Irma Collín

Víctor Delgado

El juicio a Igor Zuev, padre de las dos niñas gemelas rusas de 12 años que fallecieron el pasado 19 de mayo tras precipitarse desde un sexto piso en el barrio ovetense de La Ería, se celebrará el 4 de abril de 2024 a las 12.30 horas. La madre de las niñas, Olga Glebova denunció a su marido poco después de la tragedia por un presunto maltrato psíquico, alegando coacciones y que este le impidió acceder a dinero y a documentación personal. Este martes, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer iba a celebrar un juicio rápido, pero la falta de conformidad del acusado con lo que pedían Fiscalía y acusación particular pospone la fecha del juicio al próximo año. El procedimiento se celebrará en el Juzgado de lo Penal número 4 de la capital asturiana.

El acusado se expone a una pena de 60 días de trabajos comunitarios, además de dos años sin acercarse a menos de 200 metros de su esposa, sin poder comunicarse con ella y sin tener acceso a armas. El Juzgado de Violencia sobre la Mujer emitió una orden de protección sobre la denunciante, concediéndole cautelarmente la custodia del otro hijo del matrimonio, de 10 años de edad, y evitando que el varón se acercase a su mujer a menos de 300 metros de distancia.

La mujer no pasó este martes por el juzgado, ya que se encuentra en Rusia, acompañada de su otro hijo. Pese a que tras el trágico suceso, su entorno sostuvo que eran una familia "normal", la madre aseguró poco después que su marido impedía viajar a Rusia con sus hijos, llegando a retener la documentación de los mismos. También declaró que el acusado era un consumidor habitual de alcohol y que en alguna ocasión tuvo que pasar noches fuera del domicilio familiar tras tener fuertes discusiones.

Desde la defensa del padre, a cargo del abogado Manuel Belinchón, afirman que la acusación ha quedado reducida a que este impedía el acceso a la madre a un cajón que se abría con llave y destacan la falta de pruebas por parte de la demandante. Consideran que la denuncia fue una forma de sacar a un niño del país sin consentimiento y que la mujer ya tiene lo que quería. Recalcan que el padre lleva meses sin saber nada de su hijo y que no tienen pensado denunciar a la madre de vuelta porque al acusado sólo le preocupa "el bienestar" del niño.

Por su parte, Francisco Zapico, el abogado de la madre, destaca que la demandante tuvo que salir del país a través del consulado porque su marido tenía requisados sus pasaportes y que esta situación le genera problemas para una hipotética vuelta a España.