Fallece Begoña del Rey, una prescriptora de la moda desde sus tiendas de piel en Oviedo

La empresaria, viuda del abogado centrista Monchu Bances, dejó la huella de su carácter en la vida social y cultural ovetense

Begoña del Rey, en una imagen reciente tomada en Oviedo. | LNE

Begoña del Rey, en una imagen reciente tomada en Oviedo. | LNE / Javier Cuervo

Javier Cuervo

Javier Cuervo

La empresaria de la moda Begoña del Rey Pantín falleció ayer en Oviedo después de doce meses de enfrentarse con fuerza de ánimo a un cáncer que aún no la había rendido hace dos días. Era la dueña de la tienda de complementos de piel Cábala, en la calle Independencia, la viuda del abogado y político centrista Juan Ramón Bances y la madre de Estefanía, María y Lara.

Prescriptora de moda, empresaria de buen gusto y acierto económico, Begoña del Rey había nacido en Bilbao, el 29 de octubre de 1944, donde su padre tenía destino militar, pero sus raíces estaban en Corao (Cangas de Onís), un pueblo que siempre usaba de referencia al hablar de su vida, por otro lado, viajera y cosmopolita. Fue la única chica entre tres hermanos varones. A los 21 años opositó al Cuerpo de Contadores del Estado. Se casó con Monchu Bances el 13 de junio de 1969 en Oviedo, ciudad que dejaron durante los años en que él trabajo de secretario del Consejo de Trabajadores en Almería.

Su entrada en el comercio ovetense comenzó a principios de los años ochenta, cuando abrió la boutique Fortunata, siguió con Cábala, que continúa abierta, y se extendió durante unos años a La Esquina de Fruela, también dedicada a los complementos de piel.

Su presencia social en Oviedo es inseparable de la de quien fue su marido, de familia muy conocida en la ciudad, trabajó en la Delegación del Gobierno, donde llegó a ser jefe de gabinete, y trayectoria política centrista, desde los tiempos de Adolfo Suárez, ya que fue secretario general del CDS en Asturias, hasta terminar en el PP. A su lado, la personalidad de Begoña se hizo notar por su combinación de curiosidad, carácter, criterio y glamour. Participó en la vida cultural de la ciudad, a través de Tribuna Ciudadana, de la Temporada de Ópera y de otras actividades musicales. Fue una melómana que disfrutó de conciertos, óperas, semanas y ciclos en teatros y auditorios españoles y extranjeros. Le gustaban los grupos diversos y divertidos y el contacto con artistas e intelectuales.

Sus hijas ampliaron aún más su mapamundi: María vive en Panamá, al servicio de la ONU; su gemela Estefanía trabaja en Madrid para el Banco Santander, y Lara reside en París con su marido, Bruno, y Kiara, la única nieta de la fallecida. El funeral por Begoña del Rey se celebra este jueves, a las 16.30 horas, en el Corazón de María.

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