Simone Grippo, nuevo central del Oviedo, fichado en el mercado de invierno procedente del Zaragoza, no pudo ser presentado ayer como nuevo jugador azul, como estaba previsto inicialmente. El defensa, según informó el club, atraviesa un proceso vírico y ayer no pudo entrenarse con el resto de sus compañeros en la vuelta al trabajo en El Requexón. A expensas de su evolución durante los próximos días, el central es duda para la expedición contra el Rayo Vallecano. Grippo, como sucede con Arribas, contaba con posibilidades de incluso ser titular contra los madrileños. Rozada tendrá que perfilar su once del domingo durante la semana, pero una de las variables podría pasar por que Christian Fernández, central izquierdo en los dos últimos encuentros, volviese a su posición natural de lateral. Si esa fuese la alternativa, en el centro de la defensa formarían Arribas y Grippo, una pareja inédita en el Oviedo. En ese caso, el perjudicado sería Mossa, que se caería del once tras dos partidos seguidos como titular en el lateral izquierdo: ante el Girona y frente al Albacete el pasado domingo.