El exalcalde de Siero Guillermo Martínez recibe en Madrid la "Manzana de Oro" del Centro Asturiano

El alcalde de Llanera, Gerardo Sanz, glosó la figura del exconsejero de Presidencia, "buen amigo, buen asturiano y buen político en el buen sentido de la palabra bueno"

Un momento del acto de entrega del reconocimiento.

Un momento del acto de entrega del reconocimiento. / LNE

M. R. /P. T.

El exalcalde de Siero y exconsejero de Presidencia, Guillermo Martínez, recibió este jueves la "Manzana de Oro", galardón que concede el Centro Asturiano de Madrid. "Me siento enormemente agradecido por esta distinción y afortunado por haber tenido la oportunidad de trabajar con personas como Begoña Serrano, es un reconocimiento de equipo del que me siento muy orgulloso", señaló con un sentido recuerdo y en referencia a la exdirectora de Emigración y Desarrollo del Principado, fallecida el pasado verano.

Martínez fue presentado por el alcalde de Llanera, Gerardo Sanz, que glosó su figura, la de "un buen amigo, de un buen asturiano, y de un buen político, en el buen sentido de la palabra bueno".

"Sentir a Asturias es trabajar por el bienestar de quienes son de Asturias vivan donde vivan.  Y de eso mucho sabéis aquí, en el Centro Asturiano de Madrid. Y también sabe mucho Guillermo, quien acompañó en las duras y en las maduras a los centros asturianos de todo el mundo. Como consejero de Presidencia vivió con toda la asturianía emigrante momentos festivos y de celebración, en los que se forjan los vínculos entre Asturias y nuestras gentes de fuera, y momentos tensos, como los de 2017 en Venezuela, en los que se validan esas fortalezas creadas para que nadie, fuera de Asturias, deje de sentir que tiene una patria querida, una Asturias de nuestros amores, y que se sienta en Asturias en todas las ocasiones", dijo Sanz.

Guillermo Martínez, segundo por la izquierda, durante su intervención en el acto, junto a Gerardo Sanz y a responsables del Centro Asturiano de Madrid y del Principado.

Guillermo Martínez, segundo por la izquierda, durante su intervención en el acto, junto a Gerardo Sanz y a responsables del Centro Asturiano de Madrid y del Principado. / LNE

El regidor llanerense destacó asimismo la faceta humana del homenajeado. Su "modestia y franca humildad", sus "fuertes y firmes convicciones, que acompañaban un carácter sereno, tranquilo". "Si pudiera dibujar una imagen de Guillermo sería la suya tras la mirilla de la vida, ese agujerito que da a la inmensidad (...). Su curiosidad, su necesidad de saber, de aprender, de vivir, y su generosidad para compartir aprendizaje y vida", señaló Sanz, que también incidió en la "lealtad" como otro rasgo que define el modo de conducirse por la vida de Guillermo Martínez.

"Guillermo siempre se va de los sitios como llega: por la puerta más grande, la del reconocimiento de quienes con él colaboran, de quienes en él depositan su confianza, de quienes obtienen los frutos de su trabajo, de su familia y de sus amigos.  Se va por la puerta grande pero sin meter ruido, como van por la vida las personas sabias.  Y es que Guillermo es la sabiduría más noble y sincera, la del continuo descubrir y aprender", añadió Sanz, amigo personal de Martínez desde la juventud.

El homenajeado estuvo acompañado por varios amigos, además de Sanz, la alcaldesa de Ponga, Marta Alonso, Otilia Requejo, directora de la Oficina de Bienes Culturales del Arzobispado y que fue directora general de Patrimonio del Principado en la etapa de Guillermo Martinez como consejero de Presidencia, entre otros.

El acto contó con la presencia del presidente adjunto del Centro Asturiano de Madrid, Andrés Menéndez Pérez, la secretaria general, Pilar Riesco, además de Marcos Niño, nuevo director general de Reto Demográfico del Principado.