Madrid, Efe
Santiago Sierra dijo ayer «no» al Premio Nacional de Artes Plásticas 2010, que ganó ayer, aduciendo que es «un artista serio», en una carta dirigida a Ángeles González-Sinde, ministra de Cultura, y publicada en su blog «Contraindicaciones». En su misiva, el artista agradece «a los profesionales del arte» que lo recordaran y evaluaran «en el modo en que lo han hecho».
Su «sentido común», explica, le obliga a «rechazar» el premio, que «instrumentaliza en beneficio del Estado el prestigio del premiado», objeta. «Un Estado», argumenta el artista, «que participa en guerras dementes alineado con un imperio criminal. Un Estado que dona alegremente el dinero común a la banca. Un Estado empeñado en el desmontaje del Estado del bienestar en beneficio de una minoría internacional y local. El Estado no somos todos. El Estado son ustedes y sus amigos», sentencia Sierra.
Defensor del lema «¡Salud y libertad!», Sierra ideó para el Pabellón de España de la Bienal de Arte de Venecia 2003 la obra «Palabra tapada», en la que el artista pedía que se solicitara un documento de identidad español para entrar al lugar, propuesta que causó mucha polémica.
Por otra parte, la obra «La crisis de la monarquía» del profesor de la Universidad Autónoma Pablo Fernández Albadalejo obtuvo ayer el Premio Nacional de Historia. La obra analiza el siglo XVII español como un tiempo de crisis.
