First Dates cuenta con un elemento esencial para enganchar a la audiencia temporada tras temporada y ser una fuente inagotable de contenido: el amor. Si bien no siempre surge la llama entre los que se presentan en las citas a ciegas, a menudo salta la sorpresa y resulta que, de repente, dos personas que estaban hechas la una para la otra acaban encontrándose en el restaurante del amor.

Carlos Sobera, presentador del programa desde sus inicios, ha sido testigo de incontables encuentros que no siempre han salido bien. Por su restaurante del amor han pasado auténticos personajes con aficiones, gustos y preferencias de lo más variadas, que han causado una verdadera sorpresa en sus acompañantes durante la cita. El programa ha marcado al presentador y eso lo ha admitido en diversas entrevistas. También ha señalado cuál piensa que es la fórmula para que el programa no pierda fuelle y ya supere los 1500 programas desde hace unos meses. "La prioridad del ser humano, antes incluso que la comida, es el amor", contó en una entrevista al periódico El País.

No es el único al que el problema ha parecido calar hondo. Aunque no sea así en la mayoría de los casos, muchas parejas han abandonado juntas el plató y actualmente siguen manteniendo una relación que, en algunos casos, ha pasado por el altar o ha dado sus frutos en forma de pequeñas criaturas. Carlos Landero recibió hace unos días el Premio Nacional de las Letras “por ser un extraordinario narrador”. El escritor de libros como “Lluvia fina”, tras recibir el premio, concedió varias entrevistas en las que habló de sus sensaciones, impresiones, etc. Una de estas conversaciones las mantuvo con el programa de Cadena Ser “La ventana de los libros”. Allí, además de charlar sobre sus libros, los cuales “llega a repudiar” una vez termina de escribirlas, confesó cuáles eran algunas de sus fuentes de inspiración.

“First Dates me parece un regalo para un escritor. Habría que pagar”, había dicho en una entrevista hace un año Luis Landero, que ahora sigue manteniendo este pensamiento. “Es como los personajes que te encuentras en la vida. Todo se inspira en la vida. Algunas cosas de las que he escrito las he sacado de ahí”, contaba Landero.