Síguenos en redes sociales:

Un espectáculo de artesanos que se convierte en una experiencia única

Un espectáculo de artesanos que se convierte en una experiencia única

Viene de la página anterior

Aunar disciplinas no es tarea fácil. Al contrario, desnudarse, despojarse, renunciar a los personalismos para dar paso a una idea mayor y mejor es la resulta incuestionable de aquellos que utilizan la inteligencia y el denominador común de ansiar y procurar la belleza como estrategia de trabajo y, a la postre, energía vital y significada en cada pequeño detalle, hasta provocar una sinergia imparable entre actores, músicos, técnicos y por supuesto, público.

Con estos mimbres, pueden imaginarse que el resultado habla por sí solo y deslumbra, enamora, engancha y anima a seguir creyendo en la idea feliz de titiriteros cotidianos que tanta falta hacen en tiempos de vacas flacas; más aun, artesanos capaces de recrear la miseria humana, el dolor, la insatisfacción, el fracaso de las ideas, la muerte de los humanos y la necesidad de trascender a cuanto nos condiciona sin rendir ni claudicar. Un espectáculo así sólo puede valorarse como lo que es: una experiencia única cada vez, una realidad efímera -a la que ya me referí- que sorprende y sirve de excusa para recibir de cuando en cuando, un soplo de aire fresco frente a todo aquello que se repite y que se niega a renovar so pretexto de estamos en crisis o cerramos por vacaciones? Una idea así, tan cercana a presupuestos conocidos y cercanos como los de «Comediants» o «La Fura», no deja de tener un componente siempre combativo y reivindicativo. La estética contemporánea no deja de sorprender, aun cuando se esté desgastando con propuestas vacías y siempre aburridas. Afortunadamente, todo es posible en el imaginario de los que nos visitan estos días y que a buen seguro, harán las delicias de los que decidan acercarse a ese rincón todavía estigmatizado de la Laboral. Una oportunidad para compartir con sus hijos dos horas de chirriante y emocionante trabajo de primera magnitud. Mejor que el fútbol, aunque la Roja siga marcando los tiempos de este país.

En buena hora.

El resultado habla por sí solo y deslumbra, enamora, engancha y anima a seguir creyendo en la idea feliz de los titiriteros

Es una oportunidad para compartir con los hijos dos horas de chirriante y emocionante trabajo de primera magnitud

Pulsa para ver más contenido para ti