Nuevo reto profesional para Mario Vargas Llosa, que a punto de celebrar su 86 cumpleaños - el próximo 28 de marzo - continúa al pie del cañón y no ha dudado en desplazarse a Málaga para presidir la primera edición del festival 'Escribidores', con el que se intenta revitalizar el vínculo entre las sociedades y literaturas de América y Europa, relacionadas por un constante tráfico de corrientes y tradiciones literarias y culturales.
Un acto al que el Premio Nobel acudió acompañado por Isabel Preysler, que ejerció de 'primera dama' y se convirtió en la gran protagonista de la velada por su elegancia, su belleza y su educación, regalando sonrisas y charlando amigablemente con todo el que se acercó a saludarla.
Inseparables y en el mejor momento de su relación cuando están a punto de cumplir 7 años de amor sin planes de boda a la vista, Isabel y Mario han vuelto a presumir de su complicidad, derrochando sonrisas y miradas cariñosas durante el acto, del que no se perdieron detalle desde la primera fila.
La 'reina de corazones', espectacular, nos dio una nueva lección de elegancia eligiendo para la ocasión un impecable traje sastre en color azul marino con cinturón a juego marcando cintura, combinado con un jersey de cuello cisne en color blanco y un collar largo con cuentas de marfil. Como complementos, abrigo de paño y bolso de piel con cadena al hombro, todo en un azul navy de lo más favorecedor.
Siempre muy atenta con los medios, Isabel aseguró que su hija Tamara Falcó está "ilusionada" por el nuevo proyecto que está grabando junto a Netflix en el que contará cómo es el día a día en su vida al más puro estilo 'Georgina'.
Orgullosa como madre y abuela, la socialité confirmó que la familia se encuentra muy bien en estos momentos: "Muy bien gracias. Todo estupendo".
