Domingo de Ramos de multitudes en Pola de Siero. Cientos de fieles y vecinos se dieron cita en la procesión del mediodía y ante la plaza de la iglesia para acudir a la bendición a cargo del párroco Fermín Riaño. Con el buen hacer y humor que le caracterizan recorrió la plaza de un lado a otro, de derecha a izquierda y de la puerta del templo hacia la carretera, para que a todos tocara el agua bendita.

"Será por agua en Asturias", dijo, después de animar a todos a que levantaran las palmas. Recordó, no obstante, que si a alguien no había llegado una gota, lo que "llega" es la bendición que se pronuncia antes, con lo que todo el mundo puede quedarse tranquilo.