Mieres / Oviedo, D. M. / J. A. A. / J. E. M.

Javier Fernández ya ha deshojado la margarita. El secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA) está dispuesto a encabezar la lista del PSOE en las próximas elecciones autonómicas y así se lo ha transmitido ya a la cúpula nacional del partido, según confirmaron ayer a LA NUEVA ESPAÑA destacados dirigentes socialistas. «La decisión ya ha sido tomada y hace tiempo que ha sido trasladada a la comisión ejecutiva federal», señaló ayer por la mañana el secretario de organización de la FSA y número dos del partido en la región, Jesús Gutiérrez, en una rueda de prensa celebrada en Mieres para hablar de la incineradora.

Gutiérrez se mostró reticente, sin embargo, a dar a conocer el sentido de la respuesta transmitida por Javier Fernández a Ferraz. La dirección regional del PSOE quiere ser respetuosa con los tiempos marcados por José Luis Rodríguez Zapatero, que determinó, ya en el comité federal celebrado el pasado 19 de septiembre, que el debate sobre las candidaturas no se abriría hasta concluida la Presidencia española de la Unión Europea, allá en julio. «Todo se conocerá en el momento más oportuno y será planteado con respeto a los órganos del partido», recalcó Gutiérrez. No obstante, el número dos del PSOE asturiano reconoció que la decisión es de sobra conocida por la cúpula del partido en la región.

Destacados dirigentes socialistas, algo menos puntillosos que Gutiérrez con los tiempos oficiales, confirmarían más tarde que la respuesta de Javier Fernández fue positiva y que el secretario de la FSA ha transmitido al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, su disposición a liderar la candidatura del PSOE asturiano en los comicios regionales de 2011. Fernández habría dado el sí en el transcurso de una reunión celebrada en Madrid en la que habría participado Zapatero, un encuentro del que ya informó el pasado domingo LA NUEVA ESPAÑA. Algunas fuentes aseguran que en la reunión habrían estado presentes también varios políticos asturianos.

Según explicó Gutiérrez durante la mañana de ayer, Fernández habría decidido su respuesta hace ya algún tiempo. «La decisión que va a tomar Javier Fernández en un futuro ya la ha tomado en el pasado», señaló Gutiérrez con una expresión un tanto rebuscada. El secretario de organización afirmó que, por su parte, tiene claro quién será «el próximo referente para los socialistas asturianos, así como quién será nuestro secretario general».

El eco sonó a reto y la contundencia de la posición esgrimida por la FSA contrasta con la ambigüedad en la que se mueve el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, sobre su futuro político pese a conocer las intenciones de Fernández. El mismo secretario general de la FSA ha reconocido en conversaciones privadas que él mismo informó a Areces de su decisión. «Ya le dije a Tini lo que voy a hacer, aunque no lo voy a decir en público», aseguraba recientemente Javier Fernández en un encuentro privado.

Pese a ello, Areces está muy lejos de escenificar un paso a un lado para dejar vía libre. Todo lo contrario. Varios dirigentes y militantes socialistas aseguran que los arecistas están tomando el pulso a las agrupaciones para conocer qué apoyos podrían tener en una hipotética carrera hacia la candidatura. Areces no oculta sus opciones. Según las fuentes pulsadas, Ferraz también habría sondeado al presidente asturiano acerca de sus intenciones de futuro, refrendándose Areces en su interés por «seguir en la política activa». «Lo de Javier está hecho, sólo falta que Tini diga cómo lo quiere hacer, porque es evidente que merece una salida digna como figura relevante del socialismo y dada la gran labor desarrollada en Asturias durante estos años», opina un destacado dirigente socialista. Otros son menos benévolos con las intenciones del Presidente y afirman que «Areces piensa mantener sus cartas hasta el final y, además, cuenta con un grupo apoyándole que defenderá a muerte sus posiciones». Otros, como el «sector ugetista», ya han dado su refrendo a Javier Fernández, mientras el SOMA, donde no gustaron mucho los movimientos de Eduardo Donaire y Justo Rodríguez Braga a favor del secretario general de la FSA, guarda silencio.

Mientras, la acción de la FSA viene a despejar dudas y a poner de relieve que Fernández es el mismo político decidido que tumbó a Álvaro Álvarez en el congreso de 2000, a parar un poco las ínfulas del Presidente y a ganar unos puntos de popularidad para el líder de la FSA.