El fondo de Rajoy para las regiones dificulta la financiación bancaria del Principado

Oviedo / Madrid,

J. A. A. / Agencias

La participación de los grandes bancos del país en el fondo estatal creado por el Gobierno de Mariano Rajoy para garantizar la liquidez de las autonomías supone una dificultad añadida para el Principado en la negociación abierta con las entidades financieras para obtener un crédito de 423 millones de euros con el que pagar las obras plurianuales comprometidas. El Gobierno asturiano, pese a esa situación, mantiene como objetivo la obtención de ese crédito en el mercado financiero para no tener que recurrir al fondo de liquidez como han hecho Cataluña o Valencia.

El Parlamento asturiano aprobó a finales de julio una ley que autorizaba al Gobierno regional a formalizar un crédito de 423 millones para afrontar inversiones y diversos pagos correspondientes a ejercicios anteriores. Mientras la Consejería de Hacienda salía al mercado financiero para negociar las condiciones de ese crédito, el Gobierno central impulsaba el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), un mecanismo estatal para que las comunidades que no obtengan financiación bancaria puedan obtener dinero para pagar sus deudas. Este fondo estará dotado con 18.000 millones, de los que 8.000 serán aportados por los principales bancos del país y los 10.000 restantes por Loterías y Apuestas del Estado y el Tesoro.

La adhesión de las principales entidades bancarias españolas a este mecanismo reduce el volumen de crédito para las autonomías que, como es el caso de Asturias, tratan de negociar financiación directamente con el argumento de que están menos endeudadas. «No se puede gastar más de lo que se ingresa. Para que las autonomías se endeuden, alguien les tiene que dejar el dinero. ¿Quién lo va a hacer en la actual situación?», planteó ayer en Oviedo el vicesecretario de organización del PP, Carlos Floriano, dejando entrever las dificultades con las que se están encontrando las comunidades autónomas en los últimos meses para obtener créditos del mercado financiero. Hasta ahora la Comunidad Valenciana, Cataluña y Murcia ya han anunciado su intención de recurrir al fondo de liquidez autonómica tras no obtener financiación de las entidades bancarias. Entre tanto, el Principado mantiene su preferencia por obtener financiación directamente de los bancos porque la situación económica del Principado «es distinta y, afortunadamente, mejor» que la de otras comunidades, indican.

El vicesecretario de organización del PP, Carlos Floriano, negó ayer que el Gobierno central haya perjudicado a las autonomías del PSOE al establecer los límites de endeudamiento para 2013 y 2014. El reparto de los límites de deuda «es una cuestión técnica, una fórmula matemática que no tiene que ver con el color político de los gobiernos autonómicos», afirmó Floriano. El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas esgrimió el mismo argumento.

«Se ha utilizado el mismo criterio para todas las autonomías», afirmó Floriano, quien puso como ejemplo que Madrid es la autonomía que menos podrá endeudarse pese a ser la que está más saneada.

Un portavoz del Ministerio de Hacienda también salió ayer al paso de las críticas esgrimidas por el Gobierno asturiano acerca de que el tope de deuda «castigaba» a las comunidades más cumplidoras. «El objetivo es reducir el endeudamiento autonómico. Se trata de una regla objetiva, que parte de la deuda que había a finales de 2011. Por eso Asturias tiene menos límite de deuda que Valencia o Cataluña; pero la ventaja de Asturias es que tendrá que amortizar menos deuda y podrá destinar ese dinero a otros fines», argumentaron en Hacienda.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, por su parte, reclamó al Gobierno de Rajoy una «corrección» en la asignación financiera prevista para la región. Aguirre considera que los 11.400 millones que el Consejo de Política Fiscal ha adjudicado a Madrid son menos de lo que le corresponde. La presidenta madrileña trató, sin éxito, de asegurar que su intención no es pedir más dinero, sino «todo lo contrario», ya que «simplemente» considera que «el dinero que la Comunidad de Madrid necesita, y con el que contaba, es el que tiene que llegar». Según Aguirre, a su región le corresponden más de 14.000 millones, no los 11.400 millones que le atribuyen. «Tendrá que haber algún error o alguna corrección», sentenció. Mientras Aguirre trataba de lograr la cuadratura del círculo -reclamar más fondos para Madrid sin enmendar la plana al Ejecutivo central-, el Gobierno andaluz acordaba encargar un estudio a los servicios jurídicos de la Junta de Andalucía para recurrir, «por todas las vías posibles» -incluidos los tribunales de lo contencioso-administrativo y el Tribunal Constitucional-, el límite de deuda «impuesto» por el Gobierno central. Al Ejecutivo autonómico «no le ha quedado más remedio» que tomar esta decisión, afirmó la consejera de Presidencia, Susana Díaz.

Cataluña, por su parte, ha descartado por el momento llevar ante el Constitucional la distribución del déficit. El consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, abogó por «empezar de cero y abrir el diálogo» con el Gobierno central.