Oviedo, J. A. ARDURA
El PP asturiano pide cuentas al Gobierno regional sobre la negociación con los bancos para obtener un crédito de 423 millones. Los populares denuncian «la parálisis y el secretismo» del Ejecutivo socialista de Javier Fernández sobre las conversaciones con el sector financiero privado y sostienen que el retraso en la concesión de ese préstamo debilitará la solvencia del Principado a los ojos de las agencias de calificación. La falta de liquidez obligó ayer a Andalucía a pedir al Estado un adelanto de 1.000 millones de euros, mientras que Cataluña sopesa la posibilidad de formalizar un «crédito puente» si no llega este mes el rescate estatal, a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).
Emma Ramos, la diputada del PP asturiano que fue interventora general del Principado durante el Gobierno de Álvarez-Cascos, criticó ayer la tardanza del Ejecutivo de Javier Fernández en formalizar el crédito de 423 millones para cumplir compromisos de pago de este ejercicio. El PP asturiano, que apoyó este endeudamiento en el Pleno de la Junta General que tuvo lugar en julio pasado, reprochó que «no se haya visto ningún resultado» y que el Ejecutivo socialista «no haya facilitado información alguna sobre la marcha de las negociaciones».
Ramos cuestionó que el Gobierno justificase la tramitación rápida de esa ley de endeudamiento «en la urgencia de disponer del dinero» y ahora opte «por la parálisis y el ocultamiento» de información sobre ese crédito. La consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, manifestó la pasada semana que el objetivo del Principado sigue siendo obtener esa financiación del sector bancario, aunque también pidió garantías al Gobierno central para que el Fondo de Liquidez Autonómica dé cobertura a todas las autonomías que necesiten dinero.
Emma Ramos sostiene que la demora de ese préstamo, que en parte servirá para pagar a empresas de la región, pone en tela de juicio la solvencia del Principado. «Cuanto más tiempo pase, más se debilitará la economía asturiana; la agencia de calificación Fitch rebajará la solvencia de la comunidad autónoma, que está, desde junio, en un simple aprobado», planteó la parlamentaria del PP, que justificó el apoyo de su grupo parlamentario a la ley de endeudamiento, que contó con la única oposición de Foro. «Esperábamos que se realizasen las negociaciones oportunas con la mayor brevedad para que muchas empresas y familias viesen sus cuentas saneadas con prontitud, pero un mes después seguimos esperando», precisó Ramos.
La diputada del PP también advirtió de que el desglose del crédito extraordinario aprobado en julio revela que el Principado no incluyó todas las facturas pendientes en el mecanismo para el pago a proveedores promovido por el Gobierno de Mariano Rajoy. «Todavía quedan facturas en los cajones del anterior Gobierno socialista de Vicente Álvarez Areces; hay obras que llevan uno o dos años inauguradas y siguen pendientes de pago», aseguró la ex interventora general.
La falta de liquidez asfixia a otras autonomías como Andalucía y Cataluña. El Ejecutivo andaluz reveló ayer que ha pedido 1.000 millones al Estado en concepto de anticipo por los ingresos procedentes de impuestos. La consejera de Presidencia, Susana Díez, precisó que el Gobierno andaluz aún no ha decidido si se acoge al Fondo de Liquidez Autonómica. Cataluña, que ya ha solicitado 5.023 millones de ese mecanismo, pedirá un «crédito puente» si no llega ese «rescate estatal» a lo largo de este mes de septiembre.
