El buen tiempo registrado en los meses de julio y agosto ha permitido mantener un altísimo ritmo de trabajo en los diferentes tajos del subtramo Pendueles-Llanes de la autovía del Cantábrico. Esta circunstancia permitirá, con casi total seguridad, adelantar a septiembre la conclusión de la obra civil del trayecto entre Pendueles y la Venta'l Pumar (el resto del subtramo, entre La Venta'l Pumar y el puente de Parres, fue inaugurado el 28 de septiembre de 2012 por la ministra de Fomento, Ana Pastor). La apertura del trayecto pendiente será otro cantar, pues tras la entrega de la obra restarán algunas tareas complementarias que debe ejecutar el Ministerio. Además, la inauguración contará con la presencia de diferentes dirigentes de Fomento -quizás hasta la misma Ana Pastor-, lo que obligará a compaginar las agendas de los implicados, una tarea habitualmente complicada.

Así las cosas, el Ministerio mantiene oficialmente como «fecha tope» para la recepción de la obra el 31 de octubre. No obstante, fuentes del departamento que encabeza Pastor aseguraron ayer que la intención de los dirigentes ministeriales es que el trayecto de Pendueles a la Venta'l Pumar, de 6 kilómetros de longitud, abra al tráfico «lo antes posible». ¿Cuándo? Lo más probable es que eso ocurra «a primeros de octubre», indicaron.

Las fuentes consultadas subrayaron que, en todo caso, la fecha exacta de culminación de la obra -y, consecuentemente, de la apertura- dependerá de las condiciones atmosféricas que se registren en septiembre. Si el buen tiempo continúa, «la apertura sí podría adelantarse varias semanas» sobre el 31 de octubre, añadieron.

El puente de Purón, que había sido señalado por la Administración central como el principal escollo técnico para la finalización de la obra civil, está prácticamente terminado, a falta sólo de los últimos detalles. La última viga del paso sobre el río Purón llegaba a la obra en piezas, a bordo de varios camiones especiales, el 17 de julio. Los trabajos en ese puente obligaron a instalar una de las grúas más grandes de España, con un peso de 1.100 toneladas y un brazo de 107 metros de altura, que tuvo que «mover» cuatro vigas de 36 metros de largo y 163 toneladas de peso.

Pese al deseo manifiesto de Ana Pastor de adelantar la apertura del tramo todo lo posible, la complejidad de la obra del puente había llevado a los portavoces ministeriales a lanzar mensajes dominados por la cautela y la prudencia. Poco más de un mes después de la llegada de aquella última viga del puente de Purón y con el trabajo casi concluido, el optimismo domina a la Administración central.

El subtramo Pendueles-Llanes, de 11 kilómetros, fue adjudicado a finales de 2007 en 58 millones de euros. Debió abrir al tráfico en el primer semestre de 2011. Esos dos años de retraso deben sumarse a los más de 15 años que acumuló la tramitación del tramo Unquera-Llanes de la Transcantábrica. Una vez abierto todo Pendueles-Llanes, quedará pendiente el subtramo Unquera-Pendueles, de 11 kilómetros de longitud, adjudicado en 106,8 millones a finales de 2007, cuya fecha oficial de conclusión es el 31 de diciembre de 2014.