El lagar Trabanco, líder en producción de sidra en Asturias, dará un paso más en su expansión internacional, a partir de la compra de la antigua planta de Asturiana de Vinos, S. A. (Asturvisa), que entró en concurso de acreedores en noviembre de 2012, ubicada en el polígono gijonés de Porceyo, una operación que se cerrará definitivamente en cuestión de días, según ha podido constatar LA NUEVA ESPAÑA.

Tan sólo falta ultimar asuntos burocráticos relativos a la situación legal de Asturvisa, para que la compañía que dirige Samuel Trabanco se haga oficialmente con las instalaciones en las que tuvo su sede una de las empresas de distribución de bebidas más conocidas de Asturias, que en los últimos años había impulsado su actividad en el sector sidrero y hostelero.

Trabanco utilizará las infraestructuras para iniciar la elaboración de un nuevo tipo de sidra destinada a la exportación, con la vista puesta en Europa y en América. "Se trata de un proyecto muy ambicioso para hacer otras sidras que nos exige el mercado, con sabores, en barril y otras modalidades", indican fuentes del lagar. Las mismas fuentes recalcan que la sidra está cogiendo auge y se nota un aumento de la demanda. "No queremos dejar pasar este momento", recalcan.

La capacidad actual de producción de la planta es de un millón y medio de litros, con capacidad de ampliación, ya que cuenta con una superficie de 8.000 metros cuadrados. Trabanco vende en 21 países, entre los que figuran Estados Unidos, México, Australia y España. La empresa embotella sidra bajo la marca "manzana seleccionada" y también forma parte de la Denominación de Origen Sidra de Asturias. Actualmente, además del lagar de Lavandera (Gijón) donde hasta el año 2010 se centralizaba toda la producción, se han incorporado nuevas instalaciones en Sariego. La empresa también cuenta con más de ochenta hectáreas de plantaciones de manzano propias.