Luanco,
Illán GARCÍA
Se cambia coche oficial por tractor. Así lo ha decidido el equipo de gobierno de Gozón (PP) para hacer frente a la crisis económica de la que no se libra ni el Ayuntamiento. «Creemos que esta medida servirá para dar ejemplo a otros gobiernos: devolvemos el coche oficial y con el dinero que obtengamos adquiriremos un tractor», explicó el teniente de alcalde gozoniego, Ramón Artime momentos después de dar uno de los últimos viajes en el Peugeot 407 «oficial» en compañía del Alcalde, Salvador Fernández, quien no tiene carné de conducir y que ayer, por momentos, tarareaba «El tractor amarillo», aquella mítica canción que popularizó el grupo asturiano «Zapato Veloz».
Y es que, parafraseando aquel tema de los años noventa, disponer de tractor «ye la forma más barata de tener descapotable». El gobierno de Gozón, sin embargo, no desea un coche deportivo como dice la canción, sino un vehículo útil para limpiar las cunetas y los caminos vecinales del concejo. «Así nos lo demandan las asociaciones de vecinos del concejo y creemos que ahora es el momento de acometer un plan para tener las carreteras secundarias y caminos listos para la temporada estival», apuntó el teniente de alcalde gozoniego, que niega que esta medida sea «electoralista» teniendo en cuenta que en poco más de dos meses se celebrarán los comicios locales y autonómicos.
Según Ramón Artime, «los gobiernos han de defender en todo momento a los ciudadanos desde el primer día de mandato hasta el último y esta medida, la de mejorar los caminos del concejo, se iba a ejecutar antes o después». Mantener el Peugeot 407 como vehículo municipal costaba unos quinientos euros al mes y el contrato firmado con un concesionario de la comarca aún no ha vencido. Por ello, el gobierno gozoniego asegura que el vehículo está en venta. «Por unos 12.000 euros, lo puede comprar cualquier ciudadano», apostilla Ramón Artime.
El tractor, sin embargo, aún no está comprado. El gobierno está analizando los precios que le ofrecen varias casas comerciales para hacerse con el vehículo agrario, eso sí, con «extras» como pala y cuchilla delanteras. «Cuando lo compremos será mediante "leasing", como teníamos el coche oficial», asegura Ramón Artime, que defiende con ardor esta insólita medida.
El alto coste que supone mantener un coche oficial para un municipio de algo más de 11.000 habitantes, a ojos de la oposición, ha sido objeto de varias críticas por parte, sobre todo, de Izquierda Unida. «Tenemos un vehículo oficial desde hace seis años, pero eso es lo de menos porque de lo contrario se pasarían los kilómetros al Ayuntamiento, como se hace en otros municipios», destaca el concejal de Hacienda popular, que añade a su vez que al quedarse sin coche oficial, los concejales utilizarán, a partir de ahora, sus vehículos particulares en el caso de realizar viajes de trabajo. «En un principio se utilizará el mío, pero si no se puede se usará el de Obras u otro vehículo municipal, todo sea por ahorrar dinero», concluyó Artime.
