Los bomberos han iniciado hoy su cuarta jornada de trabajo ahora en la vigilancia y control de los focos calientes del incendio declarado el pasado lunes por la tarde en las inmediaciones de la fábrica de Alcoa, entre Avilés y Gozón, han informado a Efe fuentes del Servicio de Emergencias (SEPA).

Durante la noche se han llevado a cabo tareas de vigilancia y control para que no se reavivaran nuevos focos y en estos momentos trabajan en la zona un bombero de Avilés y dos cooperativas forestales, compuestas por cuatro miembros cada una.

El incendio, que se cree que pudo haberse originado por las chispas producidas por una línea de alta tensión, fue extinguido en la madrugada del martes, aunque el calor y el viento reavivaron el fuego horas más tarde.

El 112 recibió una llamada a las 17:55 horas del lunes de unos operarios de Red Eléctrica (REE) que alertaban de un problema con una línea de alta tensión que estaba soltando chispas.

El SEPA no tiene ninguna previsión sobre el tiempo que permanecerán estos dispositivos en el lugar, que de momento se mantendrán para evitar el riesgo de que rebroten nuevos focos.