Una controvertida decisión para el tejido industrial avilesino

Rechazo frontal de la plantilla al ERE de Saint-Gobain: "Vamos a dar la batalla"

Anuncian las primeras movilizaciones de los trabajadores ante una decisión "tan traumática" que afecta a toda la sociedad asturiana

Varios vehículos acceden a las instalaciones de la factoría de La Maruca

Varios vehículos acceden a las instalaciones de la factoría de La Maruca / Mara Villamuza

I. García / C. Jiménez

Con voz quebrada y en un clima de desasosiego, la presidenta del comité de empresa de Saint-Gobain, Verónica Otero, inició ayer la primera de las dos asambleas convocadas para compartir con la plantilla el anuncio de cierre de la división de Sekurit en la fábrica de Avilés antes del próximo mes de junio y que se llevará por delante 160 empleos. Si bien eran conocidas las circunstancias económicas del negocio de vidrio para el automóvil, la decisión ha sido recibida como un auténtico "mazazo" para el tejido industrial de la comarca.

"Rechazo frontal" fue la primera valoración desde las filas del comité de empresa ante el ajuste anunciado este lunes, que ha dejado "en shock" a buena parte de la plantilla, desde los puestos directivos hasta el resto de la plantilla. En Avilés son cerca de 400 trabajadores en total entre la división de Sekurit y la de Glass.

A primera hora de la mañana, a las puertas de la fábrica, antes de la asamblea de la mañana, se respiraba también un clima de inquietud. Manel Balboa, trabajador de Glass, lo explicaba así: "Esta decisión nos afecta a todos, van a cerrar y echar a 160 a la calle. Estamos todos afectados, no lo queríamos asumir pero se veía venir".

Poco después, Juanjo González, también empleado de la división de Glass en Avilés, la vinculada a la fabricación de vidrio para el sector de la construcción, se pronunciaba en estos términos: "En esta fábrica siempre tenemos que dar la batalla, esta vez no va a ser menos". Y en esas están.

Piden visibilizar la situación de los trabajadores en otras multinacionales en el Principado

"La medida es tan traumática para las personas que trabajan indirectamente en las contratas que prestan servicio como para el resto de la plantilla", manifestaron en un comunicado hecho público a última hora de la tarde de ayer. Y tiene alcance para toda la sociedad asturiana, remarcaron.

A lo largo de esta semana, señalaron, plantearán movilizaciones para dar visibilidad a la situación, no solo por las circunstancias que afectan a las personas que trabajan en Sekurit sino también a las afectadas por idéntica situación en otras multinacionales asentadas en el Principado y que también "dejan de generar trabajo", advirtieron desde el comité de empresa de Saint-Gobain en Avilés.

Los trabajadores mantendrán un encuentro esta mañana con la dirección de la empresa para abundar en los planes de cese de actividad en la línea de Sekurit de La Maruca. En ese encuentro, confían poder concretar los términos de la regulación de empleo anunciada este lunes y que ha sido un auténtico golpe para el corazón industrial de la región, que ha revivido estos días la situación de la multinacional Alcoa, cuando en 2019 anunció su salida de la comarca de Avilés para acabar tiempo después en manos del fondo suizo Parter y, posteriormente, unos inversores que bajo la denominación Alu Ibérica que ahora están siendo juzgados en Audiencia Nacional por los indicios de fraude y descapitalización de la sociedad.

Desde el comité de Saint-Gobain sí recordaron que hace dos años la compañía trató de plantear otra regulación de empleo que afectaba a 43 puestos de trabajo siendo posible entonces atenuar los efectos e, incluso, que en el último momento se retirar el ERE. "En más ocasiones se plantearon también regulaciones temporales de empleo", subrayaron los representantes de los trabajadores en alusión a la complicada situación que encadena el mercado del vidrio del automóvil.

Para la línea de Glass que también opera en Avilés se ha anunciado una inversión por importe de cinco millones de euros, según los planes detallados por los responsables de la compañía y que ahondará, como se ha dicho, en su apuesta por el sector de la construcción que según han explicado en varias ocasiones es firme.

El objetivo de una fabricación neutra en emisiones para 2050

La empresa Saint-Gobain anunciaba hace apenas unos días, cuando aún no se conocían los despedidos planteados para Avilés, que su apuesta en el sector de la construcción era firme, tanto que para 2050 su reto es conseguir ser neutra en emisiones. En un reciente congreso que es la referencia en innovación en el sector de la construcción, sus responsables señalaron que su objetivo era poner el foco tanto en la reducción de las emisiones directas como en las de su cadena de valor, para lo que trabaja ya en sus procesos y con proveedores. Las construcciones de las ciudades del futuro comprenderán la concepción de edificios con elevada eficiencia energética y muy bien aislados, donde resultará fundamental la realización de infraestructuras y transportes eficientes. Según el Barómetro de Hogares que Saint-Gobain presentará próximamente el futuro pasa por conocer «lo que las personas necesitan y valoran» en el sector de la edificación. El grupo sobre economía circular de la compañía trabaja en el área de descarbonización. En este sentido, las prioridades para ese futuro «verde» pasan por el desmontaje y valoración de residuos frente a las demoliciones. También atienden al desarrollo de los principios de sostenibilidad y digitalización.

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