Los estudiantes encerrados en la biblioteca del campus gijonés suman nuevos apoyos. Esta semana un nutrido grupos de profesores de la Escuela Politécnica de Ingeniería ha iniciado una recogida de firmas entre el personal docente e investigador para exigir "la inmediata reapertura" de este servicio y que se reconsideren igualmente los cierres realizados en otros centros. "Solicitamos que se inicie justamente el proceso contrario: potenciación de estos servicios descentralizados, con horarios de apertura más amplios, mejora del material docente, aumento de la dotación de libros en la medida de lo posible e incorporación de servicios informáticos", plantean, entre otras propuestas los profesores.
A la iniciativa se han sumado con el doble lema de "Potenciar y no desmantelar. Escuchar y no imponer" una treintena de docentes vinculados a los departamentos de Matemáticas, Pedagogía, Derecho, Química, Historia, Organización de Empresas y varias áreas de Ingeniería, quienes manifiestan su desacuerdo con "la estrategia centralizadora y de cierre de las bibliotecas" que el equipo rectoral ha iniciado en varios centros de la Universidad de Oviedo. Recuerdan los docentes que las bibliotecas son un "elemento fundamental" en los nuevos enfoques de enseñanza del Espacio Europeo de Educación Superior destacando la función de las bibliotecas de centro, cercanas al estudiante, dotadas de bibliografía específica para cada disciplina, con horarios amplios y bien dotadas de recursos informáticos como elemento formativo imprescindible. Eso sí, añaden que esto "no está reñido con la existencia de bibliotecas centrales" como defienden desde el vicerrectorado de Investigación y desde el Servicio de Bibliotecas de la Universidad de Oviedo. No obstante, los profesores demandan una mayor "transparencia" en las decisiones académicas que se aborden en este sentido, priorizando siempre la atención a los estudiantes porque "nunca puede ser desmantelar los servicios públicos que tenemos y que funcionan correctamente". Y añaden que si desde la dirección de la Universidad se indica que no existen motivos de índole económica estas medidas resultan aún más incomprensibles.
A las reivindicaciones del campus de Gijón se sumaron esta semana sendos encierros en las bibliotecas de Psicología y Medicina. En dicho conflicto también trataron de mediar ayer desde la sección sindical de Comisiones Obreras en la Universidad de Oviedo pidiendo al Rectorado que establezca un marco de negociación con los estudiantes movilizados para dar curso a sus reivindicaciones; además de explicar a los órganos de representación sindical la propuesta global de reordenación del servicio de biblioteca y que se presente dicho plan a toda la comunidad universitaria posibilitando un consenso previo a la adopción de "medidas drásticas y unilaterales".
Desde Juventudes Socialistas de Gijón entienden que el equipo rectoral ha puesto de manifiesto en este conflicto "una total incapacidad para el diálogo" al excluir de la toma de decisiones a los alumnos en asuntos que les atañen directamente.
