David ORIHUELA

La Cocina Económica de Oviedo, que desde finales del siglo XIX pone plato en la mesa a los necesitados, superará este año la cifra de las 100.000 comidas servidas, lo que supone el doble que en 2007, antes de que estallase la crisis económica, año en el que por las mesas que las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl sirven en la calle San Vicente de Oviedo pasaron 54.000 usuarios.

Es el milagro de los panes y los peces, como lo calificó ayer el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, durante la bendición de la mesa en la comida anual del patronato de la institución benéfica. El Arzobispo pidió al Señor para que «siga haciendo milagros con nuestros pocos panes y peces, para que los más necesitados puedan seguir teniendo un plato en la mesa».

Las cifras que expuso Jaime Rojo, presidente del patronato, son contundentes, y por ello «desgraciadamente», subrayó, la Cocina sigue cumpliendo la misma función que cuando fue creada en 1888 por Fray Ramón Martínez Vigil. Rojo destacó también el éxito de la comida para llevar a casa. Los servicios sociales del Ayuntamiento solicitaron a las Hijas de la Caridad que entregasen menús para llevar a las familias necesitadas que tienen hijos menores de edad, ya que los niños no pueden acceder a la Cocina Económica. La iniciativa ha funcionado, y entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de este año se habían entregado de este modo 19.136 menús, lo que supone un 20,88 por ciento del total de comidas servidas en el mismo período.

Durante la comida del patronato el alcalde, Gabino de Lorenzo, resaltó el compromiso municipal con la institución, y se comprometió a ampliar la ayuda económica si fuera necesario. «El Ayuntamiento ha bajado el presupuesto todo lo que pudo y en todo lo que pudo», explicó, para añadir que «si hay que echar una mano mayor, se hará». En los presupuestos municipales de 2011 se han rebajado un 10 por ciento todas las subvenciones menos las de la Cocina Económica, Cáritas y Proyecto Hombre. Es así porque De Lorenzo está convencido de que «las decisiones que hay que tomar en este país van a conducir a que la cola de usuarios siga creciendo», y porque «las medidas que hay que tomar nos van a poner en nuestro sitio, que ya es malo, pero va a ser peor».

A la comida de ayer acudieron representantes de todas las empresas y entidades que con sus aportaciones hacen posible el mantenimiento de la Cocina Económica de Oviedo.