E. VÉLEZ

La canción más popular de los cumpleaños sonará mañana en el Campoamor interpretada por voces privilegiadas, una de ellas, la de una diva. La soprano Montserrat Caballé y su hija, Montserrat Martí, ofrecerán un concierto para celebrar los 120 años de vida del teatro, acompañadas por la orquesta «Oviedo Filarmonía» y bajo la batuta del director Marzio Conti.

La presencia de Caballé en el aniversario tiene un alto valor simbólico, ya que la vinculación de la cantante con el Campoamor viene de tiempo atrás, en concreto, hace más de cuatro décadas. Allí interpretó los grandes papeles operísticos que la han hecho célebre y ofreció numerosos recitales. En concreto, la cantante debutó en Oviedo en 1968 con los títulos «Roberto Deveraux» y «Tosca», junto a su marido, el tenor Bernabé Martí. En 1981 recibió el premio «Príncipe de Asturias» de las Artes y en 2006 fue galardonada con el premio lírico «Teatro Campoamor» por toda su carrera. La celebración del cumpleaños de la instalación ovetense tampoco le es ajena, ya que actuó hace veinte años con motivo del primer centenario.

Madre e hija ofrecerán un programa integrado por arias y dúos operísticos y de zarzuela, con la particularidad de cantar como extra el «Cumpleaños feliz». El recital comenzará a las ocho de la tarde con la obertura de «Carmen», de Bizet, a cargo de Caballé; «Je veux vivre», de «Romeo y Julieta», por Montserrat Martí; «Canzone egizia», de Catalani, con Caballé, y «Viens, Malika», con las dos sopranos. La segunda parte será más española, con la habanera de «Don Gil de Alcalá», a dúo; «Canción de Paloma», de Barbieri, por Caballé; «No quiero que sepa», de Vives, para Martí; «Canción andaluza», de «El dúo de la africana», por Caballé; «Yo quiero a un hombre», de «El cabo primero», de Caballero, por Martí, y, por último, «Zapateado», de «Chorizos y polacos», de Barbieri, a dúo madre e hija.

Caballé, una de las sopranos más destacadas de la historia, está inmersa en una gira por los principales teatros de ópera mundiales para conmemorar los cincuenta años de su debut en el Liceo de Barcelona.