«No la vi, cuando me di cuenta ya estaba encima». El autor del atropello en el que falleció en enero pasado una vecina de Buenavista de 79 años, Ángeles Lorenzo Bravo, en un paso de peatones cuando salía del centro de salud del Cristo, declaró ayer en la fase de diligencias previas que ha abierto el Juzgado de instrucción número 4 de Oviedo para investigar si hubo delito o falta en la actuación del conductor. Así, el imputado ratificó ayer en sede judicial la declaración que hizo en su momento a los agentes de la Policía Local que realizaron el atestado: circulaba por la calle Rafael Altamira y realizó un giro para incorporarse a la calle Álvaro Flórez Estrada y continuar la marcha en sentido descendente. En esta intersección existe un paso de peatones regulado por un semáforo por el que estaba cruzando la mujer, que salía del ambulatorio, pero no se percató de su presencia, por lo que la mujer terminó atropellada.

La familia de la mujer fallecida está personada en el proceso como acusación particular. Su hijo, Guillermo Villa Lorenzo, explicó ayer a este periódico que «lo más probable es que la causa se archive» pero que la muerte de su madre debe servir al menos para que no se produzcan nuevos accidentes de este tipo. En este sentido, señaló que sería conveniente reforzar la seguridad vial en la calle Álvaro Flórez Estrada. «Mi madre está muerta y eso no tiene vuelta, pero llevan mucho tiempo diciendo que ese paso de peatones es peligroso y si se pueden evitar otras muertes, deberían hacer algo», aseguró ayer el hijo de la fallecida.

Tras el accidente de circulación en el que falleció Ángeles Lorenzo Bravo, la Asociación de Vecinos del Cristo-Buenavista inició una campaña de recogida de firmas para reclamar el cambio en la ubicación del paso de peatones, ya que consideran que se trata de un cruce peligroso, que permite a los conductores pasar en ámbar en una incorporación que tiene poca visibilidad. Por ahora, el Ayuntamiento no ha tomado ninguna decisión sobre el cambio del paso de cebra.

Durante los dos primeros meses de este año, el número de atropellos en la ciudad se disparó. El mes que falleció la vecina de Buenavista, con 18 atropellos registrados, fue el peor enero en cuanto a datos de sinestralidad en cinco años. Aunque la mayoría de los atropellos registrados este año fue de carácter leve, se produjo otro atropello mortal en febrero en el que falleció una mujer también de edad avanzada, Pilar Escotet Álvarez, que cruzaba la calle General Elorza fuera del paso de peatones. El mismo mes se produjo un atropello en Hermanos Pidal en el que una mujer resultó herida de gravedad. Esta misma semana una mujer sufrió un atropello grave en la calle Río Sella de Ventanielles.