"Vengo a ver a mi colega". Manolín el Gitano repitió esta frase a todo el que se le acercó en la esquina de la calle Doctor Casal con Uría. Fue allí media hora antes de que comenzara el acto de inauguración de la estatua de "Rufo", el perro callejero más famoso de Oviedo. Por algo los dos, Manolín y "Rufo", formaron una pareja de "clásicos" en el municipio. El concejal de Cultura, Roberto Sánchez Ramos, "Rivi", le saludó afectuosamente antes de pronunciar el discurso de presentación. Incluso le citó en varias anécdotas. Agradecido, Manolín aplaudió las palabras de "Rivi" y se mantuvo al lado del exalcalde de Oviedo y exeurodiputado, Antonio Masip, también citado en el anecdotario perruno. Manolín posó con la reproducción de bronce de su colega "para tener un recuerdo" y también por petición popular. Muchos le solicitaron una semeya junto al perro. "Sí, sí. Cómo no. Hagan las fotos que quieran", decía Manolín pese a moverse con dificultad a causa de una lesión que le obliga a llevar muletas. Al final, la petición fue suya: "Oye, 'Rivi'. Yo también quiero una estatua". "A ver, Manolín, todo no se puede", zanjó el concejal.