Oviedo, María ALONSO

La Consejería de Vivienda y Bienestar Social aprobó durante el primer cuatrimestre de este año 5.219 prestaciones del salario básico, más que las tramitadas durante 2006, que fueron 5.127. Actualmente, son beneficiarias del salario un total de 12.295 personas, lo que supera en un 1,8 por ciento el total de personas beneficiadas durante todo el ejercicio de 2006, que fue el primer año completo de funcionamiento de la nueva prestación.

Pedro Rodríguez, director general de Servicios Sociales, asegura que de las solicitudes valoradas han sido denegadas 155, principalmente por superar los solicitantes los ingresos mínimos garantizados. En la percepción del salario social existe un gran flujo de entradas y salidas, es decir, de beneficiarios que por encontrar empleo dejan de percibir los recursos del Principado. Así, durante el primer cuatrimestre del año 472 prestaciones en alta, el 9,04 por ciento del total, fueron suspendidas por superar los ingresos mínimos necesarios.

El perfil de la población beneficiada es claro. Mujer, de 50 años para arriba y a cargo de una familia. La Consejería de Vivienda y Bienestar Social tiene ya totalmente definidas las características de los asturianos más necesitados. Durante el primer cuatrimestre de 2007 se consolida el predominio de la mujer, ya que es la titular de las prestaciones del salario social básico en el 62,8 por ciento de los casos. Un tanto por ciento que se eleva todavía más en el caso de las unidades de convivencia de dos y tres miembros, es decir, en las familias monoparentales.

La edad de las personas que reciben la prestación es avanzada y se sitúa en los 50 años, aunque en el 23,05 por ciento de los casos los titulares del salario son personas mayores de 64 años. Entre las novedades del perfil y la situación de los demandantes destaca el hecho de que la prestación se está convirtiendo en un complemento a otros ingresos. «Ha disminuido el componente de unidades de convivencia que perciben una prestación de salario íntegra por carecer de otros ingresos y se ha incrementado el componente de unidades de convivencia a quienes el salario complementa a otros ingresos», asegura el director general de Servicios Sociales, que señala que mientras que en 2006 el 33,6 por ciento de las personas recibía la prestación íntegra por ser su único ingreso, actualmente la cifra ha bajado a un 29,7 por ciento y, por tanto, para el 70,3 por ciento supone un complemento.

Rodríguez asegura, además, que han alcanzado el objetivo de la agilidad en la gestión de la prestación que se proponía en la ley del salario social básico y que actualmente están resolviendo las solicitudes en un máximo de tres meses.