Oviedo, L. Á. VEGA

El magistrado José Álvarez Domínguez, una institución de la judicatura asturiana, falleció ayer en el Hospital Central a los 93 años, tras una corta enfermedad. Padre del presidente de la Audiencia, José Ignacio Álvarez, el magistrado llegó a Oviedo a finales de los cincuenta, donde se hizo cargo de uno de los dos juzgados de la ciudad. Del otro se encargaba Mariano Rajoy Sobredo, padre del presidente electo. Más tarde presidió la Sala de lo Civil de la Audiencia Territorial, antecedente del TSJA, hasta jubilarse en 1985.

Quienes lo trataron lo recuerdan como un hombre de humor envidiable, aficionado al fútbol y seguidor del Barça. Algo de ese humor dejó traslucir en la entrevista que concedió a LA NUEVA ESPAÑA el pasado 22 de noviembre para hablar del padre del presidente electo del Gobierno, del que dijo que había estudiado más que él en las oposiciones que les abrieron a ambos la judicatura.

La capilla ardiente quedó instalada ayer en el tanatorio de Los Arenales. El funeral tendrá lugar hoy, sábado, a las cuatro de la tarde, en la parroquia del Corazón de María. Luego será enterrado en el cementerio de El Salvador.