Mercedes Fernández, presidenta del PP asturiano, considera que su partido debe hacer una autocrítica profunda después de las elecciones del 24 de mayo. Tras asistir al comité ejecutivo nacional que evaluó los resultados electorales, en el que "el ambiente era de profunda tristeza" y en plena crisis de los barones de su partido, que han empezado a anunciar una cascada de congresos extraordinarios para facilitar relevos en el partido, Fernández considera que los populares deben asumir que algo no han hecho bien. Y apunta como ejemplo a la política sobre la minería del carbón desarrollada por el ministro de Industria, José Manuel Soria, sumándose a las críticas del presidente en funciones de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. "Comparto la visión de Herrera sobre la gestión del carbón que ha hecho el ministro Soria. Desde luego, no ha ayudado", sostuvo Mercedes Fernández.

La presidenta popular aseguró, ante el anuncio de las renuncias en algunas baronías de su partido, que "en la reunión no se hizo ninguna declaración expresa de renuncia", aunque "es cierto que el ambiente era de profunda tristeza y gran decepción, porque pese a haber mantenido escaños y concejales, a veces los números no lo son todo, y todo el mundo bajó en votos", dijo, en referencia a los presidentes territoriales del partido. La presidenta del PP asturiano (la única dirigente popular que subió en número de votos en España, y que logró un representante más en la Junta General) considera que el bajón electoral de su partido debe "hacer reflexionar", y que enrocarse es un error. "No entro a valorar si hay que hacer un recambio de personas, lo que sí tengo meridianamente claro es que hay que hacer un cambio de discurso, de forma de hacer política, y de sintonía con los ciudadanos", afirmó.

Mercedes Fernández declinó, sin embargo, cargar sobre la espalda del presidente popular, Mariano Rajoy, con el peso de los poco halagüeños resultados electorales. "El presidente no concurría a estas elecciones, y se implicó en la campaña, compaginándola con sus obligaciones", valoró.

A juicio de la presidenta de los populares el PP tiene que "modernizarse", ser capaz de "hacer una política más flexible y cercana".

"No puedo entrar a valorar lo que decidan hacer otros dirigentes de mi partido, no tengo las claves internas de Aragón o de Valencia, lo que sí puedo decir es lo que tengo que hacer yo: menos despacho y más calle. Tanta sesión, tanta comisión, no son efectivas, a la gente no le llega esa política del siglo XIX. Hay que modernizarse, ser más efectivos y más flexibles", reclamó la presidenta del PP.

La presidenta de los populares hizo estas valoraciones ayer por la tarde, cuando comenzó a desatarse un goteo de anuncios de renuncia de distintos presidentes del PP. A Alberto Fabra, presidente del PP de Valencia, se sumó el presidente del PP balear, José Ramón Bauzá, que anunció que tras el verano convocará un congreso extraordinario y no se presentará a la reelección, un anuncio similar al hecho por la presidenta del PP aragonés, Luisa Fernanda Rudi, aunque la líder popular aragonesa ha puesto una fecha más tardía, 2016, tras el congreso nacional del PP. La crisis postelectoral del PP no llega a Asturias, donde han resistido el bajón electoral.